Adrián Ruíz
Tiempos guindas. Los tiempos electorales están en contra del azul -PAN-. Favorecen a los guindas -MORENA– y su Cuarta Transformación. Es el factor principal de la indecisión de Eduardo Rivera Pérez, para decidir si va por la gubernatura, senaduría o reelección.
Los números que le presentaron en el cuartel personal -25 poniente y 3 sur- del edil municipal, retratan un descalabro contundente por la gubernatura. Lo que significaría que Eduardo Rivera, descartaría esa posibilidad. Para enfocarse a una senaduría plurinominal.
Los números tampoco le alcanzan, para pensar en repetir en la presidencia municipal. El gris papel en su segundo periodo al frente de la capital poblana lo colocan en una posición de rechazo de poblanas y poblanos.
A Eduardo Rivera la ciudadanía le cobraría la misma factura que a su antecesora Claudia Rivera Vivanco -MORENA-. El espejismo que es aceptado por los gobernados, es un ardid de su equipo publicitario.
Pablo Montiel Solana y Néstor Gordillo, operadores políticos del edil municipal, tienen las cifras -muy bajas- reales del nivel de aceptación que Eduardo Rivera, tiene entre poblanas y poblanos. Además que no le alcanzan para disputar la gubernatura. Tampoco al partido -PAN- que representa tiene con que arrebatar la administración estatal a MORENA.
Ni Eduardo ni el PAN en coalición con PRI y PRD, tendrán resultados favorables en las elecciones de 2024. Los vientos soplan a favor de MORENA. La oposición en Puebla, está pintada de un azul pálido insuficiente para ser un obstáculo real.
Aunque los detractores digan lo contrario, cuando al PAN lo comandó Rafael Moreno Valle, fue un partido poderoso. Asumió un control -sin ser panista de cepa- total. Sometió al panismo de tal manera que nadie en su momento decía nada.
Incluso se dio el lujo de dar migajas al PAN de los yunquistas en la persona precisamente de Eduardo Rivera, para hacerlo presidente municipal por primera vez en las elecciones de 2010. Tan sometidos tuvo a los panistas, que el oriundo del estado de México, ni se enteró que era el edil capitalino.
A partir del gobernador extinto el PAN, volvió a ser lo que era una fuerza de tercera en Puebla. Para que el azul pueda recuperar algo de luz, necesita competir en coalición.
Eduardo y su instituto político sin ayuda, estarán destinados al fracaso. Sin importar quien sea el candidato guinda -claro a menos que se tratara de Claudia Rivera-.
Ni por equivocación Eduardo Rivera, tiene los tamaños de Rafael Moreno Valle. Tampoco el liderazgo que se necesita para aspirar a la gubernatura poblana. Se trata de un político gris. Y en tiempos en los que MORENA ostenta el poder y preferencias, las aspiraciones del panista son nulas.
A lo máximo que aspira Rivera Pérez en las próximas elecciones es: a sobrevivir políticamente. De decidir ser candidato a la gubernatura, será su tumba política. Desaparecerá del escenario sin remedio.
¡Indecisión premeditada!
Reporte del Informante
Ineficacia pura. De nueva cuenta el Fiscal Gilberto Higuera Bernal, volvió a mostrar que es un cero a la izquierda para el esclarecimiento de delitos de alto impacto e impartición de justicia. Pasaron tres días sin aprehender a nadie por la ejecución de un elemento de la Guardia Nacional en la Central de Abasto.
La eficacia de Higuera Bernal y su gente “asusta”, imparte justicia a la velocidad de una tortuga. A pesar que hay evidencias de como sucedieron las cosas la tarde noche del pasado viernes en la nave “C”. El Fiscal de Puebla, voluntariamente se pone una venda en los ojos, para emular a su exjefe el muerto.
La mala noticia para poblanas y poblanos es que el muerto a través del Congreso del Estado, lo ratificó en el cargo de Fiscal para el periodo 2020-2027. Es decir todavía el viacrucis durará otros cuatro años. Tiempo suficiente para que Gilberto Higuera, haga y deshaga a su antojo.
En teoría serán cuatro años de larga espera. En la practica sólo será más de un año. El próximo gobernador, bajo ninguna circunstancia lo mantendrá como Fiscal de Puebla.
La buena noticia para la ciudadanía es que restan 16 meses para el final de la actual administración estatal. El adiós de Gilberto Higuera, será eminente. Sea quien sea el próximo mandatario, no continuará.
¡Cero a la izquierda!
ruizdur@hotmail.com
Azul pálido
RELATED ARTICLES