Adrián Ruíz
Españoles invadieron México. El gobierno barbosista que nació muerto, perdió la última batalla ante el gobierno federal. El presidente López Obrador, comprobó la evidente incapacidad física de Gerónimo Barbosa para gobernar. El gobernador fue el único del presídium que no vio nada del desfile. Le pasó de noche. La ceguera que padece es inocultable. La indiferencia fue el trató que recibió de parte de quién manda en el país.
Lo ignoró. Lo reprendió. Intentó disimular su molestia contra el gobernador poblano. No lo consiguió. Optó por alejarse de él.
Antes de la mañanera, sostuvieron un diálogo breve. Con la presencia del secretario de gobernación Adán Augusto López Hernández -quien para variar no soporta a Gerónimo Barbosa-. Las diferencias fueron notorias. Luego de los minutos de plática López Obrador, salió molesto a cumplir con su conferencia.
Hizo esfuerzos para fingir la molestia que sentía. Fue cordial con Gerónimo en su trato en público. Dijo sin convicción que estaba contento con el desempeño del gobernador poblano. No podía decir lo contrario.
La plática se centró en el tema prioritario del presidente: LA SUCESIÓN DE GERÓNIMO. Atrincherado y necio Barbosa Huerta insistió que aceptará a cualquier candidato siempre y cuando no sea un expriista -alusión directa a Ignacio Mier y Alejandro Armenta-. El presidente contraatacó enérgico: “tampoco voy a permitir se apoye a ningún panista -misil directo a Eduardo Rivera”. Cortó el diálogo con un rotundo: “nada quiero saber del PAN”. Estas avisado.
Molesto López Obrador, acabó la plática. Ya no le permitió hablar a Gerónimo. Al presidente se le agotó la paciencia con cifras, datos y estadísticas, podría iniciar una campaña de desprestigio -más desprestigiado no puede estar- contra Barbosa. El presidente ha sido muy compasivo con el gobernador. Sabe que si deja la gobernatura simplemente se muere.
El resto de permanencia de la AMLO en Puebla, fue tirante. Durante el desfile cívico militar, el rechazo al gobernador no lo pudo ocultar. Gerónimo Barbosa ni se percató por la nula visibilidad que tiene. Lo que al presidente le urgía era que finalizará el desfile para alejarse de Barbosa Huerta.
Tampoco pasó desapercibida para AMLO la ignorancia de Gerónimo, cuando expuso que los españoles -no franceses- fueron los que combatieron en Puebla al ejército mexicano. Contradijo al presidente quien minutos antes afirmó que españoles e ingleses, retiraron sus tropas. Y sólo Francia declaró la guerra a México.
Para Gerónimo quienes se retiraron fueron FRANCESES E INGLESES. Y LOS ESPAÑOLES FUERON DERROTADOS EN LA BATALLA DEL 5 DE MAYO DE 1862.
Que alguien -ninguno de su equipo porque están igual o peor- lo instruya en historia básica.
!Gobernador limitado!
Reporte del Informante
Escenas delatoras. Si el propósito de Gerónimo Barbosa en los festejos de la batalla del 5 de Mayo, fue el de causar lastima extrema lo consiguió. Los pasajes fueron incontables. Tres escenas dejaron al descubierto los daños físicos que limitan al máximo su condición física.
La dos más elocuentes ocurrieron en el estrado dónde presenció el desfile. Cuando todos los presentes aplaudían por la exhibición de escolares y militares, Gerónimo, reaccionaba segundos después porque escuchaba las palmadas, porque no veía más allá de 30 centímetros.
Otra lastimosa escena ocurrió al simular ver la hora en su reloj. El aparato lo llevó a su nariiiz. Antes el presidente y su comitiva se dirigieron al monumento a Ignacio Zaragoza, cruzaron en segundos la calle para depositar la ofrenda. Gerónimo con dificultad apoyado por su Lazarillo, se quedaron rezagados.
Otra escena de pena ajena en el desfile Gerónimo Barbosa le dice algo al presidente quién se mantiene a distancia sin prestarle atención.
La precaria situación del gobernador fue exhibida en grado superlativo. Solo él y quienes lo rodean se engañan. Lo mejor es que acepte su condición de discapacitado.
!Capacidades diferentes!
ruizdur@hotmail.com
