Adrián Ruíz
Diferencias notorias. Los cierres de precampañas del morenista Alejandro Armenta y el panista Eduardo Rivera, tuvieron significativas diferencias. El respaldo de la plana mayor al “yunquista”, mostró que están con él en la odisea. El senador a pesar de la multitudinaria asistencia, lo dejaron solo.
La precandidata presidencial Xóchitl Gálvez, el presidente nacional del PAN, Marko Córtes y todo la plana panista local -incluidos los yunquistas-, acudieron al cierre de actividades de Rivera Pérez. En una contienda en la que está en juego la gubernatura de Puebla, lo menos que esperan los involucrados es apoyo de los pesos pesados.
En cambio el morenista Alejandro Armenta, contó con la distinguida presencia de la viuda Rosario Orozco, quién además acudió en representación del impresentable Julio Huerta Gómez. El coordinador de la precampaña, tuvo actividades más importantes que atender.
El coordinador de promoción -Julio Huerta- de la precampaña, es uno de los múltiples negativos en el equipo de Alejandro Armenta. Fue un acierto que no llegará al cierre de la precampaña. El error mayúsculo consistió en mandar como representante a la viuda Rosario Orozco.
En el equipo del senador algo no funciona como debiera. Tal vez por ese motivo, acudió -ayer- a la capital del país. Alejandro Armenta se reunió con la dirigencia de MORENA. Pero sobre todo fue a platicar con la precandidata Claudia Sheinbaum.
Las primeras señales de la precampaña están lejos de ser las óptimas, para un precandidato que tiene la consigna de ganar con dos millones de votos. La estrategia para la campaña -marzo-, tendrá que mejorar sustancialmente.
El senador, dirigencia de MORENA, gobiernos federal y estatal, tienen tiempo suficiente para replantearse como asumir la campaña oficial. También corregir la clave suma de gente que resta -incluida la cercana a él-. Aunque sigue al frente en las preferencias. La elección puede cerrarse.
El bando contrario -Eduardo Rivera-, sin presión porque está en calidad de víctima, sigue con el plan trazado. Sabe que el siguiente pasó -campaña-, será el factor que incline la balanza para uno y otro lado.
La “guerra” sucia jugará un papel importante. En el cuartel de la alianza panista, se prepara todo un arsenal al respecto. Existe abundante material que causará estragos. A pesar que en el equipo armentista, aseguran que tienen el antídoto para evitar daño.
¡Lo bueno está por venir!
Reporte del Informante
Visita obligada. El presidente López Obrador, adelantó su primera llegada del año a Puebla, para el próximo sábado en Tepeaca. La saturada agenda presidencial por el cierre de administración, contemplaba la visita presidencial el 5 de Mayo. Fecha en la que ya estarían en marcha las principales obras programadas en la capital poblana.
El adelantó de su visita en teoría, servirá para supervisar la correcta entrega de apoyos de Bienestar en Puebla. La secretaría a cargo de Rodrigo Abdalá – hasta septiembre de 2023, aspirante primero a la gubernatura y ahora a la presidencia municipal-, la utilizó para reunir recursos en una campaña inútil.
En el gobierno federal, conocen a detalle el desempeño de Rodrigo Abdala. Está por demás una supervisión. Lo que deriva en que la visita del presidente López Obrador a Puebla, vislumbra otras aristas diferentes a lo que concierne a Bienestar.
¡Inesperado arribo!
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