Adrián Ruíz
Cadena delictiva. En territorio prohibido se ha convertido la carretera de Esperanza a Puebla y viceversa. La perfecta organización de criminales, policías y Guardia Nacional, permite atracos a automovilistas. Las maniobras las realizan a todas horas -noche y día-.
Es vergonzoso pero es la realidad que vivimos los poblanos. Sin defensa estamos al filo de la navaja. La poderosa red que han extendido delincuentes y cuerpos de seguridad, nos tiene en jaque a lo largo y ancho del estado -en realidad en todo el país-.
Lo riesgoso para los viajantes es que además del quebranto económico. Las vidas de familias completas están en riesgo. Los criminales concretan los despojos con armamento de uso exclusivo del ejército –ametralladoras y pistolas de grueso calibre-.
Cuidado con la Policía Estatal es el grito generalizado de la población. La expresión gutural de un matrimonio, amigos de La Entrega, se ahogó en la carretera el pasado lunes. Al vivir una de las peores experiencias.
El pasado lunes a las 18:30 horas al regresar de su estancia en la ciudad de Córdoba, Veracruz a la altura del kilómetro 222 con dirección a Puebla. Justo 5 kilómetros antes de llegar a la caseta de Esperanza, en territorio Poblano. Un grupo de aproximadamente 13 individuos armados hasta los dientes les salieron al paso en la autopista.
Los delincuentes empezaron a seleccionar vehículos y procedieron quitar pertenencias. Específicamente relojes, celulares y alhajas de manera rápida.
Ante la interminable fila de vehículos, como fueron los primeros, huyeron en medio de dos trailers. Lo verdaderamente grave aconteció a un kilómetro antes del lugar de los hechos.
Estacionada había una camioneta pick up de la policía estatal. A otro kilómetro más se encontraron a la patrulla estatal número 1183. A los elementos les reportaron los hechos.
Un policía corpulento de entre 50 y 55 años de edad, escuchó sin inmutarse. En ese momento su compañero de aproximadamente 35 años de edad, sacó su teléfono móvil y marcó un número.
En pocos segundos empezó a hablar para decir: “ábranse ya están reportando, ábranse”. Ante el nuevo peligro se alejaron.
Sin la presencia de los patrulleros, llamaron al 911 para pedir auxilio y reportar el comportamiento del elemento policiaco. Al Llegar a la caseta, encontraron un retén de la Guardia Nacional, que casualmente se encontraba apostado a un costado.
Pensaron que estaban seguros y volvieron a relatar lo sucedido. La respuesta los sacó de su gran error: “si ya reportaron al 911 ellos van a mandar elementos”.
De acuerdo con todo lo que vivió el matrimonio viajero. No hay duda: Policía Estatal y Guardia Nacional, son copartícipes en los asaltos en carretera sobre la autopista Puebla-Orizaba.
La omisión para actuar de inmediato y el “pitazo” del guardián estatal así lo demuestran. Al parecer necesariamente tiene que suceder una tragedia de lamentables dimensiones para asumir medidas -tardías y simuladas como siempre-.
El ejemplo claro ocurrió en Matamoros con los cuatro norteamericanos -dos muertos- violentados por la delincuencia. Algunos conductores y gente en la caseta, comentaron que el problema está fuera de control.
Los atracos ocurren al menos dos veces por semana. En ocasiones de ida a Veracruz. Y otras de llegada a Puebla.
¡Robos en despoblado!
Reporte del Informante
Enlaces tóxicos. La maquinaria informativa oficial, debe trabajar acorde a los nuevos tiempos del gobierno estatal. La cabeza principal: Alejandro Suárez, carga con la responsabilidad de hacer crecer al gobernador Sergio Salomón.
Sabe que no cuenta con el mejor equipo de enlaces -jefes de prensa-. Pero sobre todo comprometidos con el proyecto. La mayoría de los 17, obedecen a los intereses de la ex vocera Verónica Vélez Macuil.
La “lealtad” que le profesan representa peligro para la labor de Alejandro Suárez. Muy cauteloso debe andar, porque tiene al enemigo dentro de casa. Urge que tome medidas al respecto.
Aunque Verónica Vélez, perdió poder de maniobra y cayó en la desgracia del “banquillo” de los acusados. Intenta seguir por el camino equivocado de hacer daño.
Y para ello utiliza a los enlaces de prensa que le reportan el acontecer diario en secretarías, direcciones y dependencias del gobierno estatal en general. Lo mismo sobre las actividades del gobernador.
Alejandro Suárez y su equipo no son ingenuos. Detectaron a los fieles de la “viuda”. A nadie extrañe que algunos tengan sus días contados en las filas del gobierno.
Tampoco el vendaval que se avecina a la viuda Vélez Macuil, por diversos motivos cometidos al frente de Comunicación Social. Abuso del poder. Pisoteó a las personas equivocadas. Y desafió a quien no debería.
Las pruebas en su contra están documentadas. Ninguna defensa será suficiente. Ni todo el dinero -mal- habido- obtenido vale lo que podría alcanzarla. Emborracharse y marearse con tan poco. Sólo les pasa a las personas limitadas.
¡Atrapada sin salida!
Felicidades. El poder de convocatoria para la conmemoración del Día Internacional de la Mujer en Puebla, fue rotundo. La marchas -seis contingentes- en diferentes puntos de la ciudad, sumaron a más de 50 mil mujeres.
Las feministas empezaron el numeroso desfile a las 12:30 en la Fiscalía General del Estado. Lo lamentable fue la pinta de monumentos y paraderos de RUTA, dónde rompieron vidrios. Lo mismo en el Teatro de la Ciudad y la Galería Municipal.
¡Numerosa participación!
ruizdur@hotmail.com
Cuidado con la policía
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