Adrián Ruíz
Cargar al muerto. El monstruo delictivo de mil cabezas encarnado en la Central de Abasto, es creación de varios factores convenientes -incluidos los propios comerciantes-. Junto con los mercados Morelos, la Cuchilla, Independencia, Zapata, Hidalgo y la Unión, completan los lugares perfectos para delinquir.
El movimiento madrugador en la Central de Abasto, facilita toda clase de negocios. El efectivo que circula a diario se traduce en millones de pesos. No existe un solo comerciante pobre en el lugar. La mayoría cuenta con toneladas de mercancía -de dudosa procedencia-. Tienen vehículos de transporte propios.
La Central de Abasto es un mal necesario para todos. Sirve a todos y para todo. Nada de lo que ocurre en el entorno es casualidad. Los azuzadores de siempre están atrás de la marcha de ayer.
No puede negarse que es verdad que algunos sufren los atropellos de la delincuencia. Pero también es verdad que otros trabajan en coordinación con los malosos.
Las reuniones de seguridad y los operativos de las autoridades son ineficaces. Delincuentes y comerciantes son alertados con anticipación. Conocen el día y hora que acudirá la fuerza pública con tiempo suficiente para esconder todo lo ilegal. Tampoco acuden al cobro de piso los maleantes porque saben de la maniobra policiaca.
La organización del funcionamiento “chueco” de la Central de Abasto. Está compuesta por la columna vertebral: autoridades, maleantes y comerciantes. Todos obtienen parte del jugoso botín. Con el adicional que cuánto se necesita “armar” la revuelta salgan a la calle a protestar principalmente contra el municipio -¿Porqué será?-.
Los “centraleros” fueron los que cultivaron al crimen organizado. Todo empezó con el juego de compra de mercancía robada. El negocio pronto creció para convertirse en Mega negocio. Para extenderse al robo de camiones cargados con frutas, vegetales y legumbres, provenientes del sur del país.
Los abarroteros reclamaron su participación para ser atendidos con toneladas de mercancía. Pronto fueron surtidos con pedidos “especiales”. El bajo costo de las adquisiciones les permite vender más baratos los productos. Lo mismo al mayoreo que al menudeo.
Como se ve todos ganan en la cadena de corrupción emanada de la Central de Abasto. El negocio creció tanto que la delincuencia, comerciantes y autoridades mantienen un pacto no firmado que les reditúa millones de pesos.
Las mafias se situaron en lugares aledaños a la Central de Abasto. La razón es estar cerca para moverse con rapidez. Las autoridades no pueden ignorar dónde se refugian los hampones.
Los sitios elegidos por los pandilleros se localizan en San Pablo del Monte. En fraccionamientos cercanos a la autopista Puebla-México en específico por Coronango, San Gerónimo Caleras, La María y anexas.
Para fortalecerse las organizaciones criminales formaron escisiones que fingían no tener vínculos con quienes les vendían mercancía robada incluso en abonos. Son los que cobran piso a los ingenuos centraleros.
El negocio prosperó pero el rechazo al pago de piso ha sido el grave conflicto. Hace un año en la Central de Abasto, mataron a dos elementos de la Guardia Nacional, que realizaban investigaciones de manera encubierta.
Los propios centraleros los “pusieron” porque pensaban que les investigaban por la compra de mercancía robada. En la Central de Abasto es un secreto a voces que conocen a los homicidas.
Al ser Puebla zona de tránsito de mercancía a la capital mexicana. Los camiones no llegan a su destino. Se queda para ser negociada en La Central de Abasto.
En la Central y mercados de la capital poblana, se vende toda clase de “mercancia”. Y cuando decimos toda es toda. Incluida droga.
Será muy complicado -imposible- controlar lo que está pasando en la Central de Abasto. Muchos comerciantes saben que sus cabezas tienen precio por eso se atrevieron a salir a protestar. Piden un batallón de marinos y otro de militares para que los cuiden. Así las cosas.
Reporte del Informante
No sé precipiten. Para quiénes apuestan porque el exgobernador Sergio Salomón no llegue al Instituto Nacional de Migración. Apuntaron mal. El exmandatario de Puebla, asumirá las riendas a principio de febrero.
La presidenta Claudia Sheinbaum, primero quiere medirle el agua a los camotes a la actitud que asumirá a partir del 20 del mes en curso Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
La amenaza latente de deportaciones masivas de migrantes mexicanos hecha por Trump es preocupante. No obstante la incorporación de Sergio Salomón sigue firme.
!La cosa es calmada!
ruizdur@hotmail.com
