Adrián Ruíz
La guerra empezó. El primer capítulo de la novela que bien podría titularse “Todos tras la Morena” será revelado este día con la publicación de la lista de los y las aspirantes a consejeros del partido. El segundo capítulo tendrá verificativo el 30 de julio con la asamblea general y la votación. Los distintos grupos desenterraron el hacha de guerra para dejar claro que correrá sangre para apoderarse del instituto político en el poder.
La elección de los 75 consejeros y 75 consejeras -en total serán 150– será de importancia superlativa porque la tribu que imponga el mayor número tendrá el aparente control. Y decimos aparente porque en la práctica el único dueño de Morena en el país es su fundador Andrés Manuel López Obrador.
Aunque el dirigente nacional es Mario Delgado, sólo es un alfil del ajedrez presidencialista. Es quién da la cara. Los operadores por debajo del agua son los hijos del presidente de la nación.
Los vástagos de López Obrador, son los verdaderos mandones en el partido. Sobre todo sus hijos Andrés Manuel y José Ramón. El primero tiene el control en la mayoría de los estados. El segundo en la capital del país y el Estado de México.
Nada absolutamente nada se mueve en Morena si no se da el visto bueno en el seno de la familia presidencial. Y la elección de consejeros y el dirigente estatal, no será la excepción. Junto con otros ocho estados tendrá elecciones de gobernador, presidente municipal, diputados locales, federales, senadores y ediles municipales.
En Puebla, Ciudad de México, Chiapas, Guanajuato, Jalisco, Morelos, Tabasco, Veracruz y Yucatán habrá renovación de mandatos y la maquinaria del poder federal, será echada a andar porque el presidente decidió que serán morenista y no arrivistas quienes compitan en las elecciones
El presidente López Obrador, se percató que en algunos estados se equivocó al permitir que gente contraria a la ideología de la 4T, asumiera el mando en estados como Puebla. Las consecuencias del error tienen convertido al estado en uno de los peores en todos los rubros.
Por esa y otras razones los aspirantes a consejeros, debieron reunir perfiles estrictos como: que hayan estado trabajando en el proyecto de Morena. Tuvieron que acreditar documental con evidencia, que han sido activos y que están comprometidos.
También demostrar que son parte del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), con documentos como el de fundador, protagonista del cambio verdadero, convención nacional democrática y gobierno legítimo. A pesar de los candados, los arrivistas buscaron colarse.
Algunos fueron rechazados, otros pasaron las pruebas. Están identificados a qué intereses responden. La oposición de los morenistas de cepa para que el partido caiga en manos de ya saben quién, se dio el fin de semana pasado. La oposición cerro filas y el enfrentamiento va con todo.
Lo dejaron claro. Traidores en Morena no tienen ni tendrán cavidad. Los dueños de Morena, tomaron cartas en el asunto de Puebla y mandaron de avanzada en días pasados a su empleado Mario Delgado para sopesar la situación.
La acción de rechazo y protesta en el hotel Puebla, no fue improvisada. Contaron con el visto bueno de la capital del país.
¡Cuchillos afilados!
Reporte del Informante
Malas compañías. La larga lista de inconformidades del gobierno federal contra el gobierno estatal de Puebla, provocó desde el inicio de administración reprobación total. Pero uno en particular tiene al presidente López Obrador, molesto por encima de todos.
Las equivocaciones de gobernar se suman por decenas y la mayoría graves. Lo que no aprueba el presidente López Obrador es el descarado apoyo a la oposición personificada en Eduardo Rivera Pérez, edil municipal de la capital poblana para la gubernatura de 2024.
López Obrador, puede pasar por alto o hacer como que no sabe hasta apoyar a un priista, pero nunca a un recalcitrante derechista panista cómo Lalo Rivera. Por algo el centro de sus obuses los dirige a Felipe Calderón, con mayor envergadura que Lalo pero de tonos iguales: azules.
El presidente tiene la radiografía del juego que empezó con el apoyo para hacer presidente municipal a Eduardo Rivera y jugar las contras a la candidata del partido Morena para reelegirse-negativo desempeño como presidenta municipal por eso ni su nombre merece ser escrito-.
¡Traición inocultable!
ruizdur@hotmaul.com
