Adrián Ruíz
A taparse todos. Las oficinas de la Secretaría de Educación Pública, se convirtieron en una casa de locos desde ayer a medio día. La protagonista principal: América Rosas Tapia, subsecretaria de Educación de Nivel Superior. En pleno ejercicio de funciones cotidianas, recibió una llamada telefónica y de inmediato llamó a gente de su confianza para despedirse.
La subsecretaría se despidió de su gente. Al mismo tiempo les agradeció por el trabajo que realizaron por casi tres años. Luego buscó a los rectores de las universidades Intertecnologicas a los que impusieron ella y Eric Cotoñeto -operador y cómplice de negocios de Gerónimo Barbosa-.
La subsecretaria y el operador formaron una dupla en la SEP, para maniatar y manejar a Melitón Lozano, secretario de Educación Pública. Con la venía de Casa Aguayo, designaron a la mayoría del personal. Ambos operaron para hacer diputada por Izúcar de Matamoros a su hermana Azucena Rosas Tapia. Le hicieron creer que puede ser e próximo gobernador. Puntada que se creyó Melitón.
Cotoñeto y América utilizaron a profesores de la región de Izúcar. Así como los recursos materiales -vehículos oficiales- para la campaña de su fraterna.
Por cierto la supuesta caída y distanciamiento de Cotoñeto y Gerónimo, es tan falsa como la honradez de ambos. Se trata de otra artimaña para que el primero se desmarque del enriquecimiento ilícito que ha conseguido en el mandato de su compañero de chapucerías. La otra semana le cuento el engaño que pretenden.
Esta es la segunda ocasión que América Rosas, se despide de su gente de confianza en la SEP. La primera vez fue en octubre de 2021. Todo estaba listo para que asumiera la subsecretaría de gobernación en sustitución de Ardelio Vargas Fosado, quién renunció para dedicarse a vender ganado en el norte del estado poblano.
Ahora Rosas Tapia será recompensada con un cargo superior a una subsecretaría. Al parecer asumirá la Secretaría de Igualdad Sustantiva. Dependencia que desde febrero carece de titular ante la salida de Mónica Díaz de Rivera.
Pero tampoco debe descartarse la Secretaría de Gobernación, dónde Ana Lucía Hill Mayoral, hace meses tiene un pie fuera de Casa Aguayo. La responsable de la política del gobierno es una más de las piezas decorativas de la “marranera”.
Es un hecho que ahora sí se va América Rosas de la SEP. No se va con las manos vacías. Por el contrario con los bolsillos repletos. Además con una plaza de tiempo completo. Faltaba más para eso la pusieron en la subsecretaría para despacharse con la cuchara grande.
América y Eric, dispusieron de infinidad de plazas de maestros. Favorecieron a familiares y amigos. Lo mismo a colaboradores y empleados de confianza para todos hubo. Sin importar que se tratará de analfabetas sin la educación media como mínimo. Y en el colmo a centroamericanos ilegales.
¡Docentes ilegales!
Reporte del Informante
Claman justicia El alud desatado en Coyomeapan por los asesinatos de Marcelo Carrera Bolaños, Teófilo Barrera Herrera y el menor de 15 años, Omar Herrera Raymundo de parte de las autoridades estatales, alcanzó al gobierno del estado. La Organización de las Naciones Unidas Derechos Humanos México -ONU DH- exige el esclarecimiento de los hechos sangrientos.
El intento de “esconder” las ejecuciones arteras de tres campesinos, mediante la “recuperación” de espacios céntricos del gobierno -tema que lleva 15 días de atención diaria- han sido infructuosos.
Nunca será más importante recuperar unos lavaderos por más historia que tengan. Tampoco espacios en el Centro de Convenciones, que sacrificar con alevosía y ventaja tres vidas humanas.
Lo mejor será reconocer que el gobierno se equivocó y los asesinatos se consumaron. Ningún atenuante a favor tienen. Fueron ejecuciones a gente indefensa.
La ONU-DH tiene razón al pedir que se deslinden responsabilidades. También la diputada que solicita el juicio político al gobernador del estado. Alguien tiene que responder por los homicidios.
¡Asesinos impunes!
ruizdur@hotmail.com
