Adrián Ruíz
Obras imaginarias. La crisis por la que atraviesa el gobierno de Puebla, no es nueva. La administración actual nació muerta desde antes de 2018. El único que finge no saberlo es el gobernador Barbosa. Acostumbrado a engañar no acepta que lo engañen. Debe entender que sus incapacidades lo limitan. Postrado en una silla es presa fácil de quienes se dicen sus amigos.
Lo engañaron los tres secretarios de seguridad anteriores. Lo engaña el actual -que se encuentra en la tablita-. Lo engaña su directora de comunicación social Verónica Vélez -aunque sabe los negocios que hace con los convenios de publicidad oficial-. Su ineptitud la conoce a la perfección. La maestría que acaba de finalizar aumentó su ambición pero no su capacidad.
Lo engañan sus familiares -sus primos los Huerta Gómez- incrustados en el gobierno. Lo engañan los actuales integrantes del gabinete. Todos sin excepción se despachan con la cuchara grande. Él los puso para eso pero con vigilancia estrecha para encarcelarlos o exhibirlos si no obedecen sus órdenes. Por eso lo engañan haciéndole creer que le son leales.
Lo engañan los hipócritas que se dicen sus “amigos” como el Judas Etílez alias Mario Alberto Mejía y en su momento el chantajista Arturo Rueda. Y en general todos los comunicadores vendidos que le ven la cara sólo por las dádivas de los contratos. La mayoría piensan y opinan que es un pésimo gobernador y peor persona. Le dicen lo contrario con alabanzas por interés.
Lo engañan al decir en público que es un gobernador inteligente. Qué sabe todo en política. Qué es tan astuto que finge estar muy enfermo -cómo si el maquillaje pudiera ocultar sus verdaderas condiciones físicas. El deterioro es evidente-.
En corto los calificativos severos -de sus “amigos”- principalmente a su persona y desempeño como administrador del estado- son negativos. Lo más lamentable es que se engaña él mismo. El engaño es tal que se cree izquierdista y de la 4T.
Los perros a los 15 días de nacidos abren los ojos. Los pen…nunca. Reclama que Verónica Vélez y la prensa oficialista no promueven las más de mil obras de su gobierno del año pasado. Y cómo hacerlo si a la inoperancia de la comunicadora oficial hay que sumarle que sólo viven en su imaginación.
El reclamo a la ineficiencia tuvo sello de sentencia: “me han comentado, gobernador tu comunicación social no funciona y empiezo a creerlo”. La más feliz por ello es una priista de cepa que se le ha metido a Gerónimo hasta la cocina. Le organiza los eventos especiales. Está lista para entrar al relevo. Sus iniciales son C.H.
Ojalá hubiera concretado las más de mil obras de impacto social -según él-, si fuera verdad las poblanas y poblanos lo tendrían en su ánimo de manera positiva. Pero como es falso la opinión pública hacía su persona es de total repudio.
Las obras de relumbrón cómo les llama a las de beneficio social -pasos vehiculares a desnivel y elevados, de transporte RUTA, museos, avenidas y bulevares pavimentadas con concreto hidráulico- benefician a los más de seis millones de habitantes. Las más de mil obras imaginarias, ni por equivocación se asemejarían.
¡Muerto viviente!
Reporte del Informante
Mal y de malas. La visible molestia de Gerónimo Barbosa contra todos el pasado viernes, obedeció a dos razones. La principal el mal trato que recibió un día antes -jueves- en la capital del país en la reunión de gobernadores morenistas en gobernación. La segunda los altos niveles de glucosa consecuencia de lo acontecido en México -de lo cual daremos detalles mañana-.
Estaba tan molesto Gerónimo que con altanería respondió en la conferencia matutina de mal modo a sus reporteros “paleros” que le hacen preguntas a modo. Ya podrá imaginar lector la dimensión del enojo. Explotó ante el cuestionamiento de si construiría un penal nuevo en Puebla.
Las obras que presume ya existían, sólo les dieron su “manita” de gato. Por eso el presidente López Obrador en sus recientes visitas -mayo- se negó a seguirle el juego a Gerónimo.
Algunas de las obras que presume y que le deberían dar vergüenza son: carretera Equimita – Huehuetla con costo 149.5 millones de pesos. La Uno de Ciudad Lázaro Cárdenas – Mecapalapa – Francisco Z. Mena, 100 millones 482 mil pesos. Carretera Coxcatlán – El Tepeyac, 96 millones 938 mil pesos.
Carretera Interserrana -ha Sido inaugurada cada sexenio-, 77.9 millones de pesos. Libramiento San Lorenzo – Tecnológico-, 47 millones 501 mil 30 pesos.
Entre los espacios públicos están: rehabilitación de Casa Puebla -un auténtico elefante blanco-, 24 millones 174 mil pesos. El Ex hospicio de Reforma, 6 millones 970 mil 350.66 pesos. Recuperación de la Casa Albisua, 4 millones 817 mil 540.75 pesos. Recuperación de la Casa del Torno, un millón 900 mil 669 pesos.
Callejón de la 2 Oriente, un millón 811 mil 640 pesos. Rastro de Tehuacán -pimera etapa- 59 millones 78 mil 361 pesos. Mercado de Huejotzingo, 42 millones 425 mil 227 pesos. Rastro de Izúcar de Matamoros: 22 millones de pesos. Mercado de El Seco, 19 millones 41 mil pesos. Mercado El Alto, 15 millones de pesos.
Así de ese corte son sus “obritas” lejos de las de relumbrón a las que llama de pasadas administraciones, pero más benéficas. Los trabajos fueron ejecutados por sus cuates. Sirvieron para justificar los millones del presupuesto anual -más de 90 mil-.
¡Obritas para los cuates!
ruizdur@hotmail.com
