Adrián Ruíz
Baja necesaria. Qué Sergio Vergara Berdejo, salga de la Secretaría de Cultura es irrelevante. Lo insólito es que en cada administración estatal o municipal se vuelve a colocar. La razón: aprovecha sus conocimientos sobre la historia de inmuebles poblanos para embaucar a los gobernantes en turno.
En las últimas cuatro décadas, bajo el amparo del gobierno ha saqueado la herencia poblana –no es único existen otros que tienen museos y galerías particulares con obras de arte principalmente de arte sacro-. Y otros que venden las obras de arte a coleccionistas.
Desde su paso por el Instituto Nacional de Antropología e Historia -INAH- en los años ochentas, se nutrió de las joyas arquitectónicas del estado. A partir de 1987, cuando Puebla fue declarada por la UNESCO, como Patrimonio Cultural de la Humanidad, arrancó su plan de saqueó.
Al mismo tiempo maquinó la “venta” de espejitos a los gobernantes sobre “descubrimientos” arquitectónicos históricos. La condición para explotarlos: que lo nombrarán titular de Cultura, Gerencia del Centro Histórico y Patrimonio Cultural o proponerlo para retornar al INAH. Sergio Vergara, saca raja de la ignorancia de los gobernantes en relación a la historia de Puebla.
La habilidad para sorprenderlos, tiene un precio alto. Tarde se percatan que fueron engañados. Cómo sucedió con el muerto, quién le había pedido su renuncia. La muerte le impidió encarcelarlo porque detectó las anomalías en la Secretaría de Cultura.
Todavía pudo sostenerse medio año más en el gabinete estatal. Asumió el cargo en julio de 2022. El gobernador Sergio Salomón, tiene los antecedentes por ejemplo: de su intervención para que los lavaderos de Almoloya, fueran propiedad privada.
El supuesto rescate de Casa Puebla en complicidad con el muerto y el arquitecto Alberto Miranda, fue uno más de los negocios de Sergio Vergara.
Considerado como un perito en inmuebles históricos -principalmente del Centro Histórico-, se convirtió en el “representante” de inversionistas inmobiliarios privados, para la apertura de incontables hoteles en casonas antiguas que conservan las fachadas. Los interiores modificados y alterados en sus arquitecturas.
A los “conocimientos” de Sergio Vergara, se deben proyectos e inventos tan descabellados como pretender hacer un estacionamiento subterráneo debajo de la plancha del Zócalo de la ciudad. Desde luego suena como algo imposible de efectuar. Pero estuvo a punto de suceder.
Tal y como se “inventó” los túneles del bulevar 5 de Mayo a la zona histórica de los Fuertes. Y un “supuesto” cementerio en el mismo lugar. En sociedad con su compadre el ingeniero Celestino Hernández, los construyeron y facturaron al gobierno del estado.
La constructora Cydsa S.A. de C.V. a nombre de su compadre Celestino, fue la encargada de las millonarias obras. Y como remate se adjudicaron un terreno de mil 200 metros cuadrados.
Con la teoría del rescate y promoción cultural y social de joyas ocultas de Puebla, Sergio Vergara y sus socios, destruyen y construyen obras para su beneficio. Los túneles y el cementerio están en completo abandono, nadie los visita.
Gracias a la “sabiduría” del ahora ex secretario de Cultura, se destruyó la Casa del Torno, inmueble histórico de la zona del Parián, para colocar la segunda estación del Teleférico. Por fortuna un servidor lo publicó en el Heraldo de Puebla, para que fuera reconstruido. Pero ya no es la original.
El daño patrimonial a la riqueza arquitectónica y cultural de Puebla, tiene nombres y apellidos. Uno que debe escribirse con mayúsculas es: SERGIO VERGARA BERDEJO. Existen otros y también se sirven de los gobiernos estatal y municipal.
La destrucción del patrimonio histórico cultural de la ciudad, se hace de manera sistemática. Hace décadas por los intereses de inversionistas inmobiliarios y funcionarios que operan a través del gobierno. Es tan basto el acervo poblano que a pesar del indiscriminado saqueo de gente como Vergara Verdejo, no se lo han acabado. Aunque poco falta.
¡Dañino personaje!
Reporte del Informante
Sábados sangrientos. Por segunda semana consecutiva Puebla tuvo un sábado sangriento -no es novedad-. ¿Y el Fiscal?. Bien gracias.? Y el secretario de Seguridad Pública?. Mejor todavía.
Ambos en sus respectivos domicilios. Como buenos burócratas laboran de lunes a viernes. Los fines de semana los emplean para el descanso. Mientras la delincuencia hace de las suyas.
La madrugada del primer sábado de julio, en el antro de vicio el Pinochos Bar, hubo un ajuste de cuentas del crimen organizado. El Fiscal Gilberto Higuera Bernal en su desgastado escaparate de los jueves, salió a decir que los malhechores entraron por una “bailarina”, que días después fue hallada muerta.
Según el Fiscal hay 20 detenidos. Para él fue resuelto el caso. El narcomenudeo en antros y toda la ciudad se efectúa con plena libertad.
La noche de este sábado en la tienda de tenis Pirma de la 11 norte entre 2 y 4 poniente, un grupo de asaltantes sostuvieron dos enfrentamientos con policía estatales.
Sobre la 2 poniente fue abatido un delincuente. Mientras un guardián resultó herido. Los restantes maleantes lograron huir.
Tal vez el Fiscal informe el próximo jueves, informe al respecto. Y en su imaginación atrapó a los delincuentes. Todo en el supuesto que se haya enterado del segundo desaguisado sabatino consecutivo.
¡Descanso permanente!
ruizdur@hotmail.com
