Adrián Ruíz
Rifa del tigre. El “desatado” peligro delincuencial en la capital poblana. Provocó el arrepentimiento de Fernando Solís Rosales, de asumir la titularidad de la Secretaría de Seguridad del Municipio. Como Notario Público en Cuautlancingo, tenía tranquilidad e ingresos seguros.
Su arrepentimiento no es por falta de estrategias para combatir a la delincuencia. Tiene una carrera policial -además de la abogacía- comprobada. Sabe de tácticas.
Sin embargo, son insuficientes ante la libre operación del hampa en las últimas semanas en la capital poblana. El “mensaje” es claro con escaso mes y medio de mando policiaco.
No es casualidad que los hampones se “desataron” a partir de octubre. Y menos casual que la delincuencia aumente en la ciudad de Puebla. Son demasiados acontecimientos de terror en poco tiempo. Lo que no es casualidad.
Lo más alarmante y por lo que se arrepiente Fernando Solís es por las amenazas de muerte a su familia. Ni toda su experiencia en el área de seguridad le alcanza para poner fuera de peligro a sus seres cercanos – hija y esposa-.
El temor y lo que le sigue del secretario de Seguridad Pública del municipio es fundado. El pánico que invadió a su esposa es alarmante. En reuniones con amistades la señora comento:
“El crimen en Puebla está feo. Mi esposo se arrepiente de haber dejado la notaría -la cuál trabaja su auxiliar-, porque le genera el doble de recursos y sin exponerse al peligro”. El temor es de tal magnitud que la notaría cuenta con vigilancia permanente.
El secretario de Seguridad Pública, recibió “mensajes” amenazantes desde la primera semana de funciones. Situación que obligó a destinar dos camionetas con guaruras para trasladar a su mujer e hija.
El arrepentimiento al cargo también se debe a que en el tiempo como mandamás en la policía municipal, descubrió que al interior de la Secretaría, existe mafia en exceso. Y los intereses son múltiples.
Pronto descubrió que se encuentra en medio de dos fuegos. Y ni para dónde moverse. No puede echarse para atrás por el corto tiempo como titular. Un mensaje que le expresaron textual: “aquí tus dotes de súper policía valen madre”.
Para marcar territorios y aclarar paradas la semana pasada. El director de la Policía Municipal Iván Tela Castro, fue blanco de un atentado en la Hacienda Santa Clara -cerca de su domicilio-. Por “fortuna” fue herido levemente -fue dado de alta dos días después-.
Este fue otro claro mensaje de la delincuencia organizada. Puebla hace años -con anuencia del muerto y sobrino Julio Huerta-, operan bandas y al menos cinco escisiones delictivas en los rubros de extorsión y narcomenudeo. Entre otros el Cártel Jalisco Nueva Generación -CJNG-, Cártel del Golfo y últimamente “La Barredora”.
Al mismo tiempo de atentados y ejecuciones, se incrementa el huachicol, huachigas y robo de autotransporte. Gracias a otro grupo más peligroso que transitan por la vida con credenciales de gente “bien”, involucrados en lavado de dinero.
Lo más alarmante de todo es que la población trabajadora que nada tiene que ver con uno y otro bando es quien mayor peligro corre. Los que viven honradamente se encuentran indefensos ante las mafias.
¡Rodeados de enemigos!
Reporte del Informante
Ardid publicitario. A toda costa el Fiscal Gilberto Higuera Bernal, busca “tapar” su salida vergonzosa de la Fiscalía General del Estado. Recurre a toda clase de falsedades. Ahora resulta que se registró para aspirar a Ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación -SCJN-.
Como acostumbra Gilberto Higuera, engaña para evitar críticas por su nulo desempeño como Fiscal de Puebla en 6 años -asumió el cargo el 8 de septiembre de 2018-. Se atrevió a enviar número de expediente 67/2024 y folio 84-PSMTRSCJN.
¿Sabrá Gilberto Higuera Bernal, que la Ley Orgánica impide que un Fiscal estatal o de una entidad federal pueda convertirse en Ministro legalmente?. Seguro lo sabe pero aprovecha la oportunidad para intentar “ocultar” su inminente salida por la puerta de la deshonra.
En términos del artículo 95 Constitucional el impedimento es imperativo para que un Fiscal estatal o de una entidad federativa pueda ser Ministro de la SCJN. En realidad es imposible que Gilberto Higuera, pueda ser aceptado para concursar y menos para ser Ministro.
El todavía Fiscal de Puebla, soltó una chinampina para que tronará e hiciera ruido. Se nota su desesperación por salir lo menos raspado de la Fiscalía. Objetivo que no conseguirá por todo lo mal que manejó la impartición de justicia.
¡Manchas imborrables!
ruizdur@hotmail.com
Infierno terrestre
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