Adrián Ruíz
Llegó julio, se fue Julio. La renuncia -obligada y anunciada-de Julio Huerta Gómez a la Secretaría de Gobernación, para buscar la gubernatura de Puebla y seguir como coordinador de Claudia Sheinbaum en Puebla. Es la confirmación de lo que hacía hace meses a “escondidas” con el escudo del gobierno.
En teoría Huerta Gómez, buscará suceder al muerto -su primo-, sin lo que representa el poder de Gobernación. En la práctica, seguirá con el respaldo del gobierno estatal. Es la última -y única- carta para la continuación de la administración actual.
La prioridad del gobierno estatal es mantener el poder otros seis años. Se jugarán el todo por el todo con Julio Huerta. Se van a utilizar todos los recursos económicos y humanos. El derroche de dinero para posesionar a su gallo y salga del sótano en las encuestas, será millonario.
Juegan en su contra numerosos factores. Destacan tres. A su favor sólo dos cosas suma en su haber.
Entre los tres puntos más importantes en contra. Y que difícilmente superará están: 1.- El principal, la designación la hará el Presidente López Obrador. Y Julio Huerta no figura en el ánimo de quién manda en el país. 2.- Carga en su espalda el peso corrupto del muerto. Poblanas y poblanos lo identifican como el primo emanado del nepotismo. Lo que se traduce en rechazo. 3.- La paupérrima carrera política local -tres años- es insuficiente para el aval de las cartas credenciales necesarias. Ello le impide una fuerte identificación con Morena.
De entrada son los factores que no juegan a favor de Julio Huerta. Y entrar a una batalla en la que políticos como el diputado Ignacio Mier Velasco y Rodrigo Abdala Dartigues, si reúnen, será como enfrentarla sin fusil.
Desde luego como cualquier poblano tiene derecho a participar. Para eso tiene dos escasos puntos a su favor: 1.- El apoyo del gobierno estatal, con todo lo que ello implica. Aunque deberá ser con extrema precaución porque un paso en falso será catastrófico. Si el gobierno federal decide vigilar y maniatan al estatal, se reducirán las posibilidades. 2.- La figura de Claudia Sheinbaum, aspirante a suceder a AMLO. Cómo posible sucesora aún no tiene el poder de decidir al candidato de Puebla.
Existen otras circunstancias que inclinaran la balanza. Aspirantes como Mier y Abdala, llevan mano. Sus nexos y trayectorias en el gobierno federal los fortalecen. Son morenistas con trabajo de años. La encuesta es otro factor más a superar. Ambos suspirantes le llevan marcada ventaja, difícil de alcanzar -por la premura de tiempo-.
Mientras Julio Huerta, se dedica de tiempo completo a la misión del gobierno estatal. En la Secretaría de Gobernación, ningún cambio habrá. Al menos en la operatividad. Sólo en el personal.
Ardelio Vargas Fosado y Andrés Villegas Mendoza -subsecretarios-, quienes despacharán, mientras se nombra al encargado de despacho -se perfila el primero-.
De otra manera el sustituto hubiera sido Javier Aquino Limón -jefe de gabinete-. Y además el personaje más cercano al gobernador Sergio Salomón. Por la cercanía es más útil en lo que se avecina.
¡Aventura sin fuero!
Reporte del Informante
Notoria diferencia. Lo que a nivel nacional, fue un festejo en grande por el triunfo de Andrés Manuel López Obrador en la elección presidencial, hace cinco años. En Puebla, fueron tres años de padecimientos y persecuciones por el gobierno represor del muerto.
Las distinciones y diferencias en el Zócalo capitalino, afloraron como suele ocurrir en las fiestas. Los invitados de lujo, reciben un trato preferencial. Los colados son convidados sin sentarse en la mesa principal.
La diferencia entre el diputado Ignacio Mier y el senador Alejandro Armenta –ambos buscan la gubernatura poblana-, en el festejo obradorista, fue obvia. La preferencia presidencial por el primero es notoria.
El diputado Ignacio Mier Velasco, tuvo motivos para vivir la fiesta como un invitado de lujo. Le dieron invitación con reservación en el templete principal. Mientras a Alejandro Armenta lo invitaron en un lugar en la explanada del Zócalo. Cómo uno más.
El diputado estuvo cerca del anfitrión principal: AMLO, Luisa María Alcalde, secretaria de Gobernación y Delfina Gómez, gobernadora del Estado de México. El lugar preferencial no fue casualidad. Fue ordenado por el Presidente.
Mier Velasco, tiene otro motivo para estar de fiesta. Antes de lo planeado, se puso al parejo de Armenta en las encuestas. Existe un empate técnico entre ambos. Lo notorio es que: mientras el senador llegó a su limite -e inició la bajada normal-, el diputado sigue a la alza. Lo que prevé que en corto lapso asuma el liderato en las encuestas.
¡Invitado distinguido!
Focos prendidos. Bastó que Ignacio Mier Velasco, mencionara por segunda ocasión la probable suma de Tony Gali Fayad a su equipo de trabajo, para que la alerta sonara en diferentes frentes. El exgobernador es un personaje con carisma de sobra para sumar adeptos a la causa del diputado.
Motivo suficiente para que Mier Velasco, externará sin tapujos: si José Antonio Gali Fayad, ex gobernador se quiere sumar a Morena de cara al 2024. Es bienvenido siempre y cuando lo haga con los valores de la 4T y trabajando para los ciudadanos y por Puebla.
Si se suma Tony Gali, aportará mayor fortaleza al equipo de Mier Velasco. El nerviosismo y temor, salió a relucir. Por algo será.
¡Cuarto bate!
ruizdur@hotmail.com
