Adrián Ruíz
Viudas sin poder. El matriarcado en el gobierno estatal, se acabó. Las dos viudas -Rosario Orozco Caballero y Verónica Vélez Macuil-, salieron por la puerta de atrás de Casa Aguayo. El gobernador Sergio Salomón, cortó los resquicios que quedaban del par de mujeres ligadas a Gerónimo Barbosa.
Nunca entendieron que desde diciembre quedaron “viudas”. Tampoco comprendieron que Sergio Salomón, no es Gerónimo Barbosa. El poder que ejercieron se les escapó de las manos. Como la vida abandonó al corrupto gobernador.
Las dos pretendieron seguir manipulando los hilos del poder. El tiempo prudente -22 días- los soportó el gobernador Sergio Salomón. Las señales que les mandó hace 12 días aproximadamente, las ignoraron.
La primera medida acertada fue: que la viuda Rosario Orozco, dejará la oficina al interior de Casa Aguayo, dónde “despachaba”. Sin ser funcionaria de gobierno no tenía porque disponer de un lugar exclusivo al interior de la sede oficial de gobierno.
Si bien Orozco Caballero, fue factor para el nombramiento como gobernador de Sergio Salomón Céspedes. La cuota de pago se saldó con el nombramiento de su primo Julio Huerta Gómez, como secretario de gobernación.
Así como otras posiciones en el gobierno estatal. Insatisfecha la viuda, pretendía seguir gobernando como lo hizo con Gerónimo Barbosa. Seguía empeñada en creer que era el poder tras el trono. Se equivocó. El gobernador empezó a imponer su propia marca: la de Sergio Salomón.
Rosario Orozco, tiene como única meta, acrecentar la fortuna de los Barbosa Orozco. Pretende seguir haciendo negocios a la sombra del gobierno estatal. No acepta que la mina de oro se derrumbó y quedaron sepultadas sus posibilidades.
A la otra viuda -la que también se creía ama y señora. Derramó más lágrimas que María Magdalena en el sepelio- Verónica Vélez Macuil, sin auditorías de por medio le descubrieron desviación de recursos como para enjuiciarla y encarcelarla.
Confiada en la protección de la otra viuda, descuidó su espalda en el manejo del presupuesto de Comunicación Social. No tuvo tiempo de “tapar” el cochinero. Quedó indefensa.
Su salida era inminente. El gobernador antes de comunicárselo -el fin de semana pasado-, la relegó. En los últimos días la ignoró. Ya no le permitió más intrigas.
Todavía la dejó que creyera que sería quien repartiría el pastel del presupuesto de este año. Se agitaba las manos con los millones que “pellizcaría”. Con quienes hizo negocios en tres años les dijo: vamos hacer convenio por 10 meses.
Salió como tenía que salir: por la puerta de atrás. Debe dar gracias al gobernador Sergio Salomón, que no la auditará para castigarla como merece.
De manera sutil la mandó al rincón del Sistema Estatal de Telecomunicaciones de Puebla -dónde era encargada de despacho. Cobraba en dos partes con la complicidad de Gerónimo Barbosa-, sólo estará unos meses para dejar el gobierno definitivamente.
La necesidad del mandatario de imponer su propia marca: la de Sergio Salomón Céspedes Peregrina, es prioridad. El tiempo de mandato se acorta día a día. Y no puede pagar factura permanentemente.
Llegó el tiempo de dar un golpe de autoridad sobre la mesa. El gobernador tiene los ases en la mano. Y los utilizará si es necesario. Sabe que cortando las piernas -como los boxeadores- la cabeza cae sola.
Y así empezó a trabajar en las secretarías y direcciones estatales. La constante actividad de colocar a su gente en lugares estratégicos -subsecretarías y direcciones principalmente-, maniatará las maniobras de los titulares.
¡Solas caen las cabezas!
Reporte del Informante
Barbas a remojar. El desmantelamiento del “Palacio de las Intrigas” edificado por Verónica Vélez Macuil y sus auxiliares en la prensa oficial, será desmantelado en los próximos días. Los enlaces de secretarías y direcciones, serán sustituidos.
Sin excepción todos y cada uno de ello(a)s, asumieron los cargos por “amiguismo” con la otrora poderosa señora Vélez. La capacidad nada importó. La única condición fue que la mantuvieran al tanto de todo lo que sucedía en las secretarías.
El abastecimiento de “chismes” era oro molido para la comunicadora oficial. Las endebles armas las utilizaba para mal informar al desaparecido Gerónimo Barbosa, quién estuvo engañado los tres años de su negativo gobierno.
Uno de los más nefastos ejemplos es Irene Díaz, “enlace” de prensa de la Secretaría de Salud. Sí, en la misma medida como se comporta -ínfulas de poder y grandeza-, fuera capaz. La deteriora imagen de José Antonio Martínez, estaría por las nubes.
Y sobre todo la ciudadanía lo identificaría como un serio aspirante a la candidatura. Pero el deficiente trabajo de Irene Díaz, lo tiene sumido en la mediocridad.
La mayoría de enlaces padecen de lo mismo. La limpia es necesaria para quitar a “aviadores” del gobierno -se les paga por no hacer nada más que chismear-. Lo mismo saldrán los auxiliares de Verónica en prensa de gobierno, sobre todo su brazo derecho Pía Pineda.
El Palacio de las Intrigas, cumplía la misión de espionaje que tanto criticó Gerónimo Barbosa a la administración de Rafael Moreno Valle. El tema es grave. Tan grave que el gobierno de Sergio Salomón Céspedes Peregrina, ha tomado medidas al respecto -pero esa es otra historia-.
¡Golondrinas a chismosos!
ruizdur@hotmail.com
