Adrián Ruíz
Burla soez. El calificativo a la medida de la mofa que hacen las “chicas” del coro -comunicadoras al servicio del gobierno- al decir que Verónica Vélez Macuil -vocera oficial – es de las mejores calificadas en su área, es el de: ridículo. La burla no puede ocultarse después que en días pasados su jefe inmediato -Gerónimo Barbosa- la exhibió públicamente ante todos los medios locales.
A grito abierto en una matinée que a diario exhibe Gerónimo la expuso como la inoperante que es. Sin reservas le reclamó: “me han dicho, gobernador tu comunicación social no funciona. Y ya lo estoy creyendo”.
Si para quien sirve Verónica, no funciona -es verdad- entonces su labor es nula. Las “coristas” maiceadas no resistieron la tentación de burlarse de su comadre. Sólo les faltó agregar que gracias a su “excelente” trabajo, Gerónimo brilla en el firmamento político nacional como el peor gobernador número 31 de 32.
Sin duda el vergonzoso lugar es merito de Vélez Macuil. Además del ingrediente de incapacidad del propio gobernador, quién a pulso se ha ganado ser uno de los peores mandatarios de la historia.
A ninguno de los dos se les puede exigir el mínimo de capacidad. Son incapaces. Ni con esfuerzo consiguen un ápice de inteligencia. Sería injusto pedirles rendimiento óptimo. Todos tenemos limitaciones. Pero está pareja de funcionarios abusan.
Por algo han “laborado” juntos varios años. La brillantes está lejos de iluminar sus cabezas. Nada pueden hacer por mejorar. La mediocridad es su destino. Las calificaciones de ambos son el reflejo de lo que son como servidores públicos.
El poder estatal de Puebla, cayó -de chiripa- en manos de mentes obtusas y pequeñas. No ven más allá de la vereda a seguir. Incapaces de proponer ideas positivas por lo estrecho de sus perspectivas flotan sin definir nada.
No es necesaria la burla de las “chicas” del coro. En Puebla está claro que como está calificada Verónica Vélez. Las alabanzas de las porristas le hacen más daño a la deteriorada imagen de Gerónimo. La de la vocera oficial nada importa lo mismo da que la eleven o la hundan.
Verónica Vélez, no es nadie. Nunca brilló, ni brilla, ni brillará. La mofa le pega directo a su jefe. Gerónimo necesita ayuda no que lo exhiban como un pobre gobernador. No un gobernador pobre porque de eso es de lo que menos carece.
Gracias a que la gubernatura les cayó de rebote -al fallecer la primera gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso, quién lo humilló por partida doble y lo hizo llorar ante la derrota en las urnas- de lo que menos carecen Gerónimo y Verónica es de pobreza económica. De las otras pobrezas si tienen y a granel.
Es bueno que entre la mediocridad en la que se mueve Vélez Macuil, algun@s intenten levantarle la moral aunque sea con burlas. Sigue así no tienes otra opción. El esfuerzo bien vale la pena, aunque no puedas dar más.
¡Intento fallido!
Reporte del Informante
Fichas falsas. La confrontación de dos fichas como son: Gerónimo Barbosa e Ignacio Mier Velazco -falsos morenistas- arrastra la credibilidad en Puebla de la 4T. Los dos tienen un historial político digno del más sucio de los priistas -similar a Estefan Chidiac-.
Lo mejor del enfrentamiento es que l@s poblan@s se enteran de algunos kilos de la suciedad que adorna sus rostros. Las toneladas y verdadera podredumbre que ambos personajes cargan en sus humanidades no ha salido a flote –con seguridad no saldrá- porque ya les marcaron el alto.
Por fortuna algunos conocemos otras cosas que no han tocado ninguno de los dos. Sería tanto como sentenciarse al castigo de la justicia. En adelante habrá un pacto de silencio. De lo contrario ambos saldrán perjudicados.
Tanto Gerónimo con Ignacio, tienen tantos kilómetros de largas colas que ocultar, que sería imposible hacerlo solos. Necesitan ayuda para que no se conozca de que están hechos. No es nada extraordinario. Es el mismo material de todos los políticos. Ni un gramo más ningún gramo menos.
¡Del mismo material!
ruizdur@hotmail.com
