domingo, septiembre 15, 2024
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Muerto el rey, viva la reina

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Adrián Ruíz
Adiós inevitable. Más allá de los logros y desaciertos de seis años de gobierno. El presidente Andrés Manuel López Obrador, no pudo evitar la nostalgia del lenguaje corporal al despedirse de la presidencia de México. Ni dejar en el poder a su mayor carta de confianza -Claudia Sheinbaum-, impidió la pena interna que lo invade.
No es fácil y menos para una persona con tanto ego como López Obrador, aceptar que en un mes dejará de ser el más poderoso de México. En una muestra de que se aferra al poder con uñas y dientes. Pero incapaz de cumplir una de las principales promesas, hecha hace seis años: solución a la desaparición de los 40 estudiantes de Ayotzinapa.
Incapaz de aceptar que no pudo -o no quiso-, resolver la mayor desaparición de normalistas. Alardeó que aún no finaliza su mandato -cierto-, que le resta un mes y pueden ocurrir varias cosas. Resulta paradójico que si en más de cinco años no hizo nada. En 30 días los encuentre.
Nadie puede negar que AMLO, es un líder que mueve a las masas. Masas a las que les gusta oír lo que quieren que les diga. Ello le permite jugar con la voluntad de quienes creen ciegamente en él.
Tampoco se puede negar que impuso un estilo nuevo de gobierno. El trillado y desgastado discurso basado en: «primero los pobres» «el pueblo pone y el pueblo quita», le sigue dando resultados. Reforzado con las acciones de los programas sociales, son la fórmula perfecta para mantener una popularidad del 70% de aceptación.
Es cierto que durante su mandato hubo cosas positivas y benéficas. Pero también es cierto que nada de la magnitud que presume el presidente AMLO. Se puede decir que se trató de un gobierno discreto con aparentes buenas intensiones. Pero solo buenas intenciones.
El combate a la pobreza se emprendió, sin duda. El resultado es mínimo. A pesar que el presidente asegure que cada mes, 100 mil mexicanos dejan de ser pobres. Eso significa que en sus visitas a los estados le maquillan la realidad. Y eso que dice que más de 40 ocasiones ha llegado a algunos lugares.
La presidencia populista de AMLO, con aciertos y errores -es mortal y nadie es perfecto, aunque muchos lo crean-. En el futuro inmediato será historia. Empezará una nueva página que escribirá la primera mujer presidenta de México: Claudia Sheinbaum.
Aunque le deba a AMLO el hecho histórico -para los dos-, deberá imponer su propio estilo de gobernar. Sobre todo porque no se trata de una dama que arrastre multitudes.
Se trata de una mujer preparada. Le gusta tener el control total. Sabe mandar e imponerse. Sin duda habrá mano dura. Tendrá la misión de postergar el poder de MORENA, al menos otro sexenio -situación no complicada porque la oposición está en la lona-.
Cómo se quiera ver el rey ha muerto, viva la reina.
El tiempo de la mujer en México, se reafirmó con la primera presidenta del país. Una nueva era se abrirá para un país, urgido de rescate verdadero.
¡Soñar no cuesta nada!
Reporte del Informante
Tras bambalinas. El último informe como presidente de Andrés Manuel López Obrador, puede verse desde varios puntos de vista. Los hechos son los hechos y ahí quedan. La reducida pasarela se la robó Claudia Sheinbaum. Toda la clase política de México, acudió a la plancha del zócalo capitalino a ponerse a los pies de la presidenta electa.
Antes del inició del informe, gobernadores, diputados, senadores y funcionarios, acudieron a la salutación con la mujer que asumirá la presidencia en unos días. Para algunos fue la última llamada para pedir una subsecretaría.
A otros Claudia Sheinbaum, les pidió informes sobre el regreso al activismo político en los estados que los eligieron.
Pidió a exgobernadores se desliguen del poder para dar paso al ejercicio de los entrantes. Claudia acaparó los reflectores como era de esperarse. Todos querían acercarse a ella. Todos intentaron hablar con la mujer del momento en el país.
El informe del presidente López Obrador. Fue el escaparate de la presidenta electa. Una poblana -Olivia Salomón-, colocada en la décima fila, durante las más de dos horas que duró el evento, intentó acercarse al frente dónde estaba Claudia Sheinbaum. No la dejaron pasar.
¡Pidió informes!
ruizdur@hotmail.com

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