Adrián Ruíz
Falsos empresarios. El vergonzoso historial delictivo de la familia Layón Aarún, es tan amplio que basta con rascar un poco para que salgan a flote toneladas de suciedad. Pepe Layón Ramé, como cabeza de familia pone el mal ejemplo. Los pasos son seguidos por sus vástagos. Sobresale Norma Layón Aarún con el cochinero que instaló en la presidencia municipal de San Martín Texmelucán.
Acostumbrado a las “tranzas”, lavado de dinero, fraudes y manejo de “polvo”, Pepe Layón no se cansa de delinquir por cualquier parte que se para. La misma actitud asume Norma Layón.
Ambos están metidos en líos legales. Los dos gozan de impunidad. Ambos reparten dinero para ocultar los negocios millonarios que les permiten acumular incalculables fortunas.
Ambos son investigados por sus acciones al margen de la ley. Los dos encarcelan a quienes les estorban como a Carlos Talavera, célebre “garrote” de pasados gobiernos de Puebla. Los dos -Layón- son investigados.
Pepe Layón, ha burlado a la justicia por numerosas denuncias. Una de las más fuertes que en la Fiscalía General del Estado, está en la congeladora es la de los defraudados del fraccionamiento Nubia Tesidencial. Construido por el hampón de cuello blanco, disfrazado de empresario. Se localiza en la lateral norte de la Vía Atlixcáyotl 7433, Reserva Territorial Atlixcáyotl, San Andrés Cholula.
La millonaria inversión de Nubia Residencial, es un concepto diseñado por arquitectos de prestigio nacional, con oficinas en la ciudad de México y la Riviera Nayarit. Cada residencia consta de 300 metros cuadrados.
Al interior de Nubia Residencial, se disfruta de los siguientes servicios: casa club, alberca techada, soporta bar, cancha de padel, gimnasio con vestidores, spa, jacuzzi, vapor, sala de espera, salón de eventos, restaurante, salón de spinning, salón de usos múltiples, sala de juntas y archivo con centro de impresión.
Cuenta con club hípico. El acceso es por la Vía Atlixcáyotl, a unos metros del área comercial Sonata y Lomas Angelópolis. En auto se llega en 10 minutos al centro comercial Angelópolis.
El lujoso fraccionamiento fue edificado con recursos de procedencia ilícita. No conoce otra manera de obtener dinero por millones. Los “supuestos” dueños no han recibido las escrituras correspondientes.
Pepe Layón se anotó otro de los múltiples fraudes que acostumbra.
El “empresario” disfrazado vive tan tranquilo como el más honesto de los ciudadanos. Ninguna aplicación de la ley se ejerce contra un pillo comprobado. Por el contrario es exhibido en la prensa vendida como un ejemplo de honestidad.
La hija Norma Layón no canta mal el tono de la ilegalidad. Como presidenta municipal, ha sido la muestra clara de la corrupción. San Martín Texmelucán, vive un índice fuera de control de la delincuencia.
Han pasado más de 20 días de la muerte de dos personas, por la irresponsabilidad de maquillar la rehabilitación de un tanque de agua. Ninguna autoridad la responsabiliza por la tragedia. Sigue despachando en el palacio municipal.
Los Layón, -Norma- encarcelaron a Carlos Talavera “garrote” de gobiernos pasados. Lo eliminaron para quedarse con la “administración” del tianguis de San Martín. Era el pago de sus actividades como golpeador. La ganancia se traduce a millones de pesos -por lo menos 30 al mes-.
Ahora es el reino de la familia Layón Aarún. La fortuna de Pepe Layón y sus descendientes debería ser investigada.
¡Fraude millonario!
Reporte del Informante
Mal empieza la semana. Unos de los peores días de octubre, tendrán poblana (o)s el próximo lunes. El Centro de convenciones testificará el falso reporte de Eduardo Rivera Pérez como edil de Puebla. La película repetida por cuarto año, es conocida por todos.
Un presidente municipal que finge trabajar para la capital poblana -esta hecha un desastre-. En realidad trabaja para él. La obsesión de ser gobernador del estado, es su principal meta.
Poco o nada importa a Rivera Pérez las deficiencias de los servicios públicos básicos. Ningún progreso se percibe en su segundo periodo como presidente municipal. En la práctica tiene cuatro años como administrador de la capital poblana. Y el resultado es el mismo: TIEMPO PERDIDO.
A la falta de servicios, se debe agregar al debe de su administración el incremento de la delincuencia. El cobro a la ciudadanía de alumbrado público -en breve será oficial-. La exigencia del pago de impuestos como el predial. Las multas de los parquímetros.
Intentó imponer multas a automovilistas, mediante establecer límites de velocidad exagerados, en vías como el bulevar 5 de Mayo, la 11 norte-sur y calles del Centro Histórico.
Esa es la verdadera cara de Eduardo Rivera Pérez. No la mascarada que utilizará el lunes próximo la de: FALSEDAD REVOLCADA CONO CINISMO.
¡El catrín mentiroso!
ruizdur@hotmail.com
Pillaje al desnudo
RELATED ARTICLES