Adrián Ruíz
Amenazas y negocios. El gobierno estatal y el Tribunal Superior, se aglutinaron en una asociación de corrupción y terrorismo político. La justicia manipulada por Gerónimo Barbosa, impone condiciones que como sabueso fiel obedece Héctor Sánchez Sánchez. Padrino y ahijado, amenazan, intimidan para sacar provecho.
El gobernador y el presidente del TSJ -Gerónimo y Héctor-, sellaron un pacto de complicidad y traición. El primero maneja a su antojo al segundo. Le ordena liberar órdenes de aprehensión a diestra y siniestra. Sin oposición obedece las instrucciones emanadas de Casa Aguayo.
Los dos se engañan, se mienten, se manejan a conveniencia. Gerónimo le dice: “Eres el bueno para sucederme. Tú eres mi gallo”. Ingenuamente el “ahijado” se la traga entera. Invierte recursos -obtenidos en negocios chuecos en el TSJ-.su mareada cabeza lo llevo a emprender una campaña con la construcción de juzgados.
Por su parte el “padrino” es vigilado y monitoreado las 24 horas del día por parte del “ahijado”. Por lo menos eso presume Héctor Sánchez, cuando se le pasan las cucharadas y las inhalaciones.
Una estrategia burda, grosera, descarada que emplean los socios para ensuciar más sus manos de corrupción es: la vociferación que hace Gerónimo a través sus “mañaneras” pagadas, cuando habla que meterá a la cárcel a un servidor público por corrupción -claro reflejo de un espejo-. Es un hecho que lanza el anzuelo para negociar.
Luego manda mensajes en la prensa -pagada a su servicio- oficialista para revelar que tienen un pie en la cárcel. Los mensajes sicilianos causan el efecto de miedo esperado. Entonces el “ahijado” a la velocidad del rayo libera las órdenes de aprehensión.
El pastel se encuentra en el horno. Los emisarios de Gerónimo, acuden al cobro de “peaje” con la promesa de que nada les sucederá y puedan seguir su camino. Los que se niegan a dejar la cuota se convierten en vecinos de San Miguel. Cómo botones de muestra: Guillermo Aréchiga y Francisco Romero Serrano.
Otra operación puesta en marcha es: el cobro de cuotas para otorgar juzgados privilegiados a ciertos jueces. A los que tienen puesto el dedo los mandan a distritos alejados de la capital poblana. La subasta por juzgados cotizados como Cholula, Atlixco y Puebla, elevan el monto del moche.
En la capital poblana hay juezas que se eternizaron en los puestos. Llevan años en los juzgados. Son inamovibles porque pagan las cuotas exigidas. Al interior del estado es la zona más placentera para los jueces de oralidad penal por qué negocian a placer sin supervisión alguna. Traen a sus encargados de sala a modo y acomodo por qué son sus “corredores” (as).
Los millones obtenidos por Héctor Sánchez Sánchez, han sido insuficiente para que su progenitora deje de vender oro y joyas en la zona del Carmen -27 oriente- pero esa es otra buena historia
¡Terror productivo!
Reporte del Informante
Oscuro panorama. El futuro político si bien le va a Ignacio Mier, podría ser el senado de la república o la repetición en el Congreso de la Unión. Las aspiraciones a la gubernatura de Puebla, nunca fueron reales.
Intentó sin conseguirlo entrar en el ánimo del presidente Andrés Manuel López Obrador. La distancia entre es abismal para imaginar amistad. El único mérito del poblano es la posición heredada por su socio -tampoco amigo- de negocios Mario Delgado, quién es un líder de papel en Morena.
Los hilos del partido guinda, fueron, son y serán manejados por la familia López Obrador. El intento de Ignacio Mier fue válido. Su sacrificio es menor comparado con el daño que pudo sufrir Morena. El circo acabó igual que su aspiración.
¡Sacrificio programado!
ruizdur@hotmail.com
