Adrián Ruíz
Focos rojos. La alerta de peligro para el gobierno de “terror” de Gerónimo Barbosa, se activó al filo de las 8 de la mañana del sábado. A la velocidad de la luz, llegó de Zacatlán a Zinacatepec. La detención -la noche anterior en el bar La Imprudencia propiedad de su testaferro- Eric Cotoñeto, lo despertó sobresaltado. No era para menos. Él no había ordenado la aprehensión de uno de sus principales secuaces.
De inmediato se comunicó con el Fiscal Gilberto Higuera Bernal, para que lo pusiera al tanto de los hechos. Una vez enterado ordenó su libertad. A pesar que los cargos eran graves. Gerónimo, estaba nervioso y asustado porque que lo trasladarían a la Ministerial Federal.
El temor era fundado podrían hacerlo “soltar” la lengua. Eso significaría el derrocamiento de su gobierno, antes de su culminación. Cotoñeto, es un eslabón clave en el mundo de corrupción de Gerónimo Barbosa. Desde su pasado en el PRD estatal y nacional, la senaduría y ahora la gubernatura.
Eric Cotoñeto, no sólo fue su “operador” político. También hasta hace unos meses fue uno de sus principales “operadores” en los turbios negocios salidos de las entrañas de la gubernatura. En junio pasado el rompimiento entre los dos compinches se dio.
A diferencia de otros funcionarios -Gullermo Aréchiga SEP, Francisco Romero Serrano ASE, entre otros- a los que encarceló Gerónimo Barbosa, por enriquecimiento, pero sobre todo por deslealtad. Eric Cotoñeto, fue “perdonado”. Es peligroso. Sabe demasiado. El “pellejo” del gobernador peligra.
Le permite disfrutar de la fortuna y bienes obtenidos al amparo del poder. A pesar de la deslealtad comprobada. Eric Cotoñeto, cayó de la gracia de Gerónimo, porque desde el primer momento del distanciamiento, recurrió al amparo del líder nacional de MORENA: Mario Delgado.
El líder de MORENA, quien para no variar también tuvo diferencias con Gerónimo -quién no-, lo mandó a “trabajar” a la Sierra Norte -Zacatlán, Tlatlauquitepec, Zaragoza, Teziutlán, principalmente- la estructura electoral para Ignacio Mier Velazco, enemigo político número uno de la cabeza de la tribu de Zinacatepec.
Sólo imaginar que Eric Cotoñeto, hablara ante las autoridades federales, causó terror a Gerónimo Barbosa. Terror superior al que impuso a su llegada a la gubernatura. Sabe que su “cabeza” no valdría nada.
¿De dónde surge la aprehensión?
El presidente municipal -priista- de Zacatlán, José Luis “Pepe” Márquez Martínez, cansado de las “extorsiones” de Eric Cotoñeto. Desde la venta de la presidencia municipal. Hace meses, solicitó a la Fiscalía General del Estado -Gilberto Higuera Bernal- operativos y vigilancia al bar La Imprudencia -propiedad de Cotoñeto-.
El fiscal hizo oídos sordos a las múltiples peticiones. A pesar de conocer que al interior circula droga y armas de fuego. Las “palancas” del cómplice de Gerónimo, le permitían exención extrema. Incluso desafiar la autoridad de Pepe Márquez.
A tal grado que Cotoñeto, se unió a su hermano Arturo Márquez Martínez, para hacerle la guerra al edil municipal. Por fin luego de insistir el fiscal sin opción, decidió la noche del sábado realizar el operativo en La Imprudencia.
Un comandante de la policía municipal de Zacatlán, “puso” a Eric Cotoñeto, quién esporádicamente acude a La Imprudencia, aún cuando es el dueño. La noche del viernes por la noche se encontraba en el interior. Sin sorpresas los agentes ministeriales lo detuvieron junto con un mesero.
Los delitos de armas y drogas son graves. Son delitos federales. Sin embargo Eric Cotoñeto y el mesero, salieron libres. Ante la detención. El “operador” en un tuit – lo borró casi de inmediato- aseguró que no fue detenido, “acudió” a la Fiscalía por voluntad propia en calidad de testigo.
Nada ocurrirá a un comprobado “pillo”. Cuenta con “armas” poderosas para que Gerónimo Barbosa le permita inmunidad. Con todo y que Julio Huerta Gómez -verdadero secretario de gobernación y primo del gobernador-, intenta enjuiciarlo por las innumerables quejas de los presidentes municipales.
Lo de Zacatlán es mínimo comparado con las fechorías, propiedades y “relaciones” que sostiene Eric Cotoñeto en Tlatlauquitepec. Los abusos y excesos de Cotoñeto y “amigo (a)s” no tiene limites.
¡Glucosa al límite!
MAÑANA NO SE PIERDA LECTOR LA SENTENCIA EN PRISION QUE ORDENO GERONIMO BARBOSA A SU CUÑADO, CON LOS DOCUMENTOS CORRESPONDIENTES.
Reporte del Informante
Cinismo extremo. Una perla plastificada que quedará plasmada en la historia con letras de suciedad fue la que cultivó, Gerónimo Barbosa, durante la conmemoración del 257 aniversario del natalicio del General José María Morelos y Pavón. En el Centro Escolar del mismo nombre de uno de los máximos héroes de la Independencia de México, se atrevió a manchar la memoria del justiciero nacional.
Los asistentes a la ceremonia, todavía se cuestionan cómo pudieron salir de su boca exclamaciones tan huecas. Lo expuesto por Gerónimo, ni él se lo creyó. Sonó tan falso como las promesas de un gobierno transparente.
Analice y juzgue lector:
“Los corruptos y ladrones que se aprovechan del poder público. No le temen a la historia, porque son tan ignorantes e irresponsables que no temen del juicio de lo que viene inmediatamente”.
Tuvo arrestos para rematar sin morderse la lengua:
“Vean dónde están aquellos que hasta hace poco eran opulentos, chocantes, arrogantes, payasos. Están en la critica de la gente”. Se necesita caradura para escupir al cielo sin que le caiga.
¡Máscara de hierro!
ruizdur@hotmail.com
