Adrián Ruíz
Corte de cabezas. A través de la secretaria de Educación, Isabel Merlo, el diputado Jorge Estefan Chidiac, abre espacios en las universidades de gobierno, para colocar a su personal. Aunque su gente ocupa la mayoría de los espacios de rectorías. Los que restan están en el paquete de peticiones del diputado.
La secretaria bajo la batuta de Estefan Chidiac, sigue el compás musical que le dicta su director de orquesta. Para evitar desentonar, pide las renuncias de rectores en las universidades públicas. Urgen los espacios para controlar todas y cada una de las instituciones públicas de Puebla.
El diputado, tiene compromisos por cumplir ante gente que lo apoya. Las rectorías cumplen el requisito de un pago magnánimo que no saldrá de la billetera de Estefan Chidiac. Y eso es garantía de seguridad para su bolsillo. Las vacaciones constantes a Miami, Florida no son baratas.
Ante la exigencia de gente a la que les hizo la promesa de una rectoría. Estefan Chidiac, movió los hilos a la secretaria Isabel Merlo, para pedir la renuncia a rectores que no pertenecen a su grupo.
Entre los que tienen sus días contados son: los de la Universidad Politécnica de Puebla -UPP- y Universidad Politécnica Metropolitana de Puebla. Las dos instituciones ya tienen candidatos. Y no son otros que personas priistas. La semana pasada les pidieron sus renuncias.
La institución que se quedó acéfala unos días fue el Instituto de Educación Digital del Estado de Puebla. Isabel Merlo, destituyó sin previo aviso al ingeniero Amoir Flores Díaz.
Para evitar el escándalo que se suscitaría por despidos injustificados en cascada. Los interesados en disponer de las rectorías -Estefan e Isabel-, lo hacen paulatinamente.
Después de los tres movimientos, habrá más despidos de rectores universitarios. Poner a gente de confianza del diputado, garantiza movilización de masas en favor de los futuros planes políticos de Jorge Estefan -Senaduría y si se “atontejan” hasta la presidencia municipal-.
Las universidades públicas, son un valioso bastión para quienes aspiran a puestos de elección popular. Estefan Chidiac, lo sabe y quiere mantener ese voto a su favor.
Con el control de rectoras y rectores, además del acarreo de gente garantizada. La captación de recursos económicos es segura. Tal y como ocurrió hace poco con Julio Huerta, quién obtuvo millones de pesos de las universidades.
Las cabezas de los rectores penden de un hilo. Rodarán de un momento a otro. La mayoría lo sabe y ante la imposibilidad de evitarlo se resignan a su suerte. La secretaria y el diputado forman una dupla que tiene a su disposición recursos humanos y económicos de la SEP.
¡Suerte echada!
Reporte del Informante
Consultorio cerrado. Las viudas, Rosario Orozco y Verónica Vélez, cancelaron la errónea campaña del doctor José Antonio Martínez. La apuesta de “revivirlo” como presunto aspirante a la gubernatura, falló en todos sentidos. El dúo femenino, recibió la tercera llamada de estar quietas.
El mensaje fue contundente: nada tienen que hacer en el tiempo político que vive Puebla. Dejen de asomar la cabeza. El filo de la guillotina, está listo para cercenárselas.
Lo mismo que al doctor Martínez, los tres tienen cuentas pendientes imposibles de pagar. Sobre todo el galeno y la viuda Vélez. Los expedientes de ambos son dignos de los mejores delincuentes de “cuello” blanco.
Ante la advertencia José Antonio Martínez, desapareció del escenario poblano por arte de magia. La viuda Vélez, detuvó la operación con los “jilgueros” que aún le siguen el juego por los añejos convenios en el gobierno del muerto.
Igual con la principal promotora del doctor Martínez: Irene Díaz, quién al frente de la comunicación de la Secretaría de Salud, les guarda fidelidad al galeno y la viuda -su exjefa en el papel, porque en la práctica la mantiene al tanto de lo que ocurre-.
Por su parte la otra viuda -Rosario Orozco-, además de la tercera notificación recibida. Pronto se percató que el “auto destape” que hizo José Antonio Martínez, no dio resultado.
Y cómo es la principal patrocinadora monetaria del proyecto sin futuro. Lo pensó mejor y no va a tirar recursos a un basurero. Ningún capital es suficiente para encumbrar a un aprendiz de político.
Las viudas enterraron al doctor como lo hicieron con el muerto en diciembre pasado. La renuncia a la Secretaría de Salud, fue el principio del fin de a quien primero utilizó el desaparecido. Y ahora las enlutadas.
Las consultas -toma de presión-, en colonias populares se suspendieron por la indiferencia de poblanas y poblanos. La única herramienta que puede explotar el médico Martínez, fue ignorada. El galeno fue desarmado con una fina cirugía, aplicada por la ciudadanía.
¡Médico desahuciado!
ruizdur@hotmail.com
