Adrián Ruíz
Reingeniería del gobierno. La diferencia entre Alejandro Armenta y Eduardo Rivera, candidatos a la gubernatura son los proyectos de gobierno y la experiencia política del primero. Mientras el senador con licencia propone atender sectores olvidados durante sexenios. El panista sigue dormido en sus laureles.
De ser cierto el anuncio de elevar a rango de secretaría de estado la dirección del deporte -INPODE-. Falsas promesas que esté reportero en los años de cubrir deportes, escuchó de Manuel Bartlett, Melquiades Morales y Mario Marín. Para Rafael Moreno Valle y el muerto, no existía la disciplina deportiva. Privilegiaron la ambición política y económica.
Son más de 25 años que existe la promesa de gobernadores priistas, panistas y morenistas que ningún apoyo brindaron al deporte. Mismo tiempo en que los mandatarios se alzaron el cuello con los logros de deportistas poblanos a nivel nacional. Organizaron ruedas -circos- de prensa para presumir que sus gobiernos, brillaron en el país.
Con excepción de Mario Marín a quien le gustaba el fútbol -construyó una cancha empastada e iluminada en su domicilio de Xilotzingo-, que jugaba con funcionarios y ex jugadores profesionales. Para Manuel Bartlett, Melquiades Morales, Rafael Moreno Valle y el muerto, el deporte que practicaban era el de “manitas calientes”.
A diferencia de Alejandro Armenta, quien desde joven practica artes marciales -karate-. Y conoce el esfuerzo y disciplina para dedicarse al deporte. Se comprometió a que en su sexenio dará vida a la Secretaría del Deporte, Cultura y Arte.
Atrás de la creación de la Secretaría del Deporte, Cultura y Arte, se encuentra el asesoramiento de Hanshi Koichi Choda Watanabe, instructor y asesor de Alejandro Armenta. En relación al anuncio del candidato, Choda Watanabe, aseguró que si el futuro gobernador se comprometió a hacer Secretaría al área deportiva en Puebla, lo cumplirá.
Para el instructor de Karate, lo que caracteriza a Alejandro Armenta es la disciplina. Recuerda que a diferencia de otros alumnos, el ahora candidato desde que inició su instrucción como cinta blanca. Lo hizo sin saltar ninguno de los rangos hasta culminar en cinta negra. Nunca pidió “brincar” de escalafón como muchos otros.
Por la cercanía con Alejandro Armenta, sería la persona ideal para estar al frente de la posible nueva secretaría. Sin embargo, se perfila Alfonso Aguirre González, presidente de la organización de Karate y Artes Marciales Afines de Puebla. Es un destacado deportista de toda la confianza de Koichi Choda.
La decepción de los congregados en la explanada del estadio de béisbol Hermanos Serdán, dónde hizo el anunció el martes pasado, se dio cuando le preguntaron sobre el o la posible secretario(a). Asistieron toda clase de entrenadores amateurs y profesionales -hasta Emilio Maurer-, hizo acto de presencia.
También Yadira Lira Carrillo, actual directora del deporte y gente allegada a Alejandro Armenta -de hecho a él le debe el cargo-. Por supuesto ante el pobre desempeñó como titular, está descartada para ascender a Secretaría de estado.
La secretaría será para una persona comprometida con el deporte cien por ciento. En Puebla, sin picos los personajes que impulsan a los atletas locales sin anteponer el lucro. Los cientos de presidentes de asociaciones, tienen un negocio a modo.
¡Encumbrar al deporte!
Reporte del Informante
Nerviosismo fundado. A decir de algunos panistas, en el feudo blanquiazul se vive un ambiente de nerviosismo ante la proximidad de las elecciones. La intranquilidad aumentó en días pasados con la revelación real de los porcentajes de desventaja en las preferencias electorales.
Los candidatos panistas, Eduardo Rivera y Mario Riestra, están ciertos que son superados por amplio margen por Alejandro Armenta y Pepe Chedraui. Las maquilladas encuestas que los ponen a la par, son espejismos.
La mayor preocupación de los aspirantes azules es el tiempo. El casi mes y medio que resta de campaña, es insuficiente para recuperar terreno.
Sobre todo por el crecimiento que Armenta y Chedraui, adquieren día a día. Los candidatos morenistas, tienen el pie pisando a fondo. Y los panistas caminan en una contienda dispareja.
El supuesto voto duro del PAN en la capital poblana, no es garantía para Lalo y Mario. En ese sentido perdieron preferencias. Sólo los ultraderechistas siguen con ellos. La cantidad es insuficientes para encumbrarlos en las elecciones, como ellos quisieran.
Tal vez sean los motivos por los que en las filas panistas empezó el sentir de resignación. Y la preparación de impugnación.
¡Panistas resignados!
ruizdur@hotmail.com
