Adrián Ruíz
Elección automática. Cuándo Claudia Sheinbaum, ganó la designación a la presidencia en automático se selló la candidatura de Alejandro Armenta al gobierno de Puebla. La decisión para el estado poblano la asumió la futura presidenta de México. Y no se equivocó.
El pacto sellado con Claudia Sheinbaum, fortaleció a Armenta. Sin la menor preocupación dejó pasar el agravio de exclusión en la lista estatal de aspirantes a la gubernatura. Los consejeros de MORENA lo eliminaron.
En la lista nacional, Claudia Sheinbaum, con la estafeta de candidata presidencial cobijó a Armenta Mier. No sólo lo incrustó entre los contendientes. Lo impuso para que fuera el candidato de MORENA a la gubernatura.
La encuesta final favoreció a Alejandro Armenta. La decisión fue de Claudia Sheinbaum. Siempre tuvo en mente al oriundo de Acatzingo -en realidad Izúcar de Matamoros-.
La virtual presidenta del país, cedió la candidatura de Omar García Harfuch en la Ciudad de México por la de Alejandro Armenta en Puebla. Negoció con López Obrador, otros de los 7 restantes lugares.
El “padrinazgo” de Claudia Sheinbaum, fue determinante para la suerte de Alejandro Armenta. Fortuna que lo tiene colocado como el próximo gobernador de Puebla. La suerte lo acompañó hasta el día de las votaciones -domingo-, al beneficiarse con la ola guinda encabezada por la primera mujer presidenta de México.
Aunque la candidatura de Armenta Mier, nunca estuvo en riesgo. Hubo días de incertidumbre. Antes de la encuesta en la ciudad de México, se esperaba que Andrés Manuel López Obrador, designará al candidato. Hasta ese momento el elegido sería Ignacio Mier -primo del próximo gobernador-.
Todavía no acordaban Claudia y AMLO. La «campaña» promocional de Nacho se incrementó. La certeza que sería el candidato de Puebla, lo llevaron a organizar una estructura de comités en casi todo el estado.
La fortaleza de Ignacio Mier, lucía como una locomotora. Todo se derrumbó al ser Claudia Sheinbaum la de la decisión. Siempre apoyó a Alejandro Armenta. El día de la encuesta definitiva, Claudia y él sabían quién sería el abanderado de MORENA.
Al ser designado Alejandro Armenta como candidato, adquirió un compromiso ineludible con Claudia Sheinbaum. Cómo abanderado se comprometió a conseguir 2 millones de votos para la causa morenista. Y por supuesto para la suya.
Aunque en su momento la apuesta parecía temeraria para propios y extraños -incluida La Entrega lo reconoce-, en el conteo preliminar ya superó la cifra. El cumplimiento de la promesa. Sin duda colocará a Alejandro Armenta, como un de los gobernadores favoritos de la presidenta de México.
Tan favorecido será que el presupuesto para el primer año de su administración, será histórico. En la misma proporción como la votación histórica en Puebla y el país -pero esa es otra historia-.
¡Gobernador preferido!
Reporte del Informante
Toluqueño noqueado. La suerte de los panistas, el toluqueño Eduardo Rivera y Mario Riestra, no podía ser de otra manera. Ninguno de los dos tiene los tamaños para gobernar al estado poblano y la capital.
Si algo caracteriza a Lalo y Mario, es lo grises que son como políticos. Se trata de dos panistas acostumbrados a la traición. Nada detiene su ambición personal.
Sobre todo el toluqueño, quien inconsolable lamenta la derrota, anunciada con anticipación. Eduardo es y será un desconocido para poblanas y poblanos. Los capitalinos que lo identifican por sus dos periodos -negativos- en la presidencia municipal, lo califican como un político pusilánime y ególatra.
Tan ególatra que no tuvo la mínima atención de ofrecer apoyo -público- a José Armando López Portillo, quien por su responsabilidad, pasará el resto de su vida en silla de ruedas. En los primeros días de campaña, como su jefe de prensa, por alcanzarlo en la Sierra de Puebla, se accidentó en la carretera.
El grave accidente originó la amputación de sus dos piernas. Era eso o la vida. Eso es una pérdida costosa e irreparable. Contrario al fracaso de una causa destinada al fracaso -gubernatura-.
La mezquindad del toluqueño, fue contestada con una cachetada de lealtad de parte de José Armando. A pesar de su discapacidad acudió a votar. Y lo hizo a favor del panista. Haber si el “azul” aprende lo que es tener valores.
¡Tómala choricero!
ruizdur@hotmail.com
