Brenda Bustamante tomó la decisión de cambiar su lugar de residencia. Emigró de Mazatlán a Puebla, y así poder estudiar en la Universidad Madero donde forma parte del equipo de basquetbol que compite en la Liga ABE. la estudiante-deportista maderista realizó un recuento de su estadía con Tigres Blancos
“Fue una decisión positiva y un cambio muy importante en mi vida. No me costó tanto adaptarme porque siempre me sentí apoyada por los entrenadores y las jugadoras. En su momento hubo compañeras de mucha experiencia que me ayudaron y eso mismo es lo que hago ahora con las jugadoras que tienen menos tiempo en el equipo”.
La basquetbolista fue parte del equipo maderista que calificó a los últimos dos certámenes nacionales de la División 2 de la Liga ABE, instancia que aportó un gran aprendizaje al equipo, mismo que hoy, cuando la temporada se encuentra a la mitad de su calendario, se mantiene invicto y como aspirante al campeonato.
“Considero que la primera vuelta ha sido muy buena. El equipo está muy unido y hay una gran química con todas las compañeras, lo cual ayuda mucho al momento de poner en práctica el sistema. Además de todo esto, que, por supuesto es muy importante, cuenta mucho el apoyo que cada una aporta, lo fuerte que se siente tanto en la cancha como en la banca. Considero que emocionalmente estamos más conectadas y eso nos permite estar más fuertes. Quizá una puede tener un día en el que las cosas no salen del todo bien, pero eso no contagia al equipo, sino que todas juntas salimos adelante, nos apoyamos y sentimos el apoyo del coach”.
Para Brenda Bustamante la fortaleza de Tigres Blancos UMAD se encuentra en la sinergia que hay entre lo técnico y lo emocional, rubros que benefician al equipo en cada juego.
“Yo veo a mi equipo como campeón. Tenemos un equipo muy fuerte tanto técnicamente como emocionalmente y a eso tenemos que sumar nuestra madurez y la comprensión que tenemos del sistema que nos ha enseñado el coach Juan Pablo Bravo”.