Posadas, celebraciones de fin de año, convivios y hasta festividades religiosas, son pretextos para que se realicen bailes sonideros en la capital poblana, a pesar de que el semáforo epidemiológico del covid-19 permanece en naranja.
Gustavo Ariza Salvatori, secretario de Protección Civil y Gestión Integral de Riesgos del Municipio de Puebla, dio a conocer que las zonas más desobedientes son las colonias Xilotzingo, La Popular, Insurgentes, Castillotla y Loma Bella.
Indicó que se suman a la lista las unidades habitacionales Agua Santa y La Margarita, así como las juntas auxiliares La Resurrección, Totimehuacan y Azumiatla, por lo que apeló nuevamente a la conciencia de los poblanos para evitar estos eventos y, en consecuencia, que el número de contagios incremente.
“Tenemos más reportes de este tipo en unidades habitacionales de la ciudad de Puebla, principalmente al sur y algunas juntas auxiliares, pero el mayor problema es en unidades habitacionales”.
Indicó que de manera conjunta con las Secretarías de Seguridad Ciudadana y Gobernación reforzarán los operativos para inhibir o suspender los bailes populares que se llevan a cabo de manera clandestina, una vez que se convoca por redes sociales o mensajes de WhatsApp para no alertar a las autoridades.
“Todos se han prohibido y resuelto con la ayuda de Seguridad Ciudadana y Gobernación a través de un operativo importante para inhibir los bailes que no se monten o en su caso para cancelarlos”.
Ariza Salvatori informó que desafortunadamente el personal que participa en los dispositivos de disuasión ha sido agredido verbalmente cuando procede a la cancelación y, a la par, los vehículos oficiales dañados debido a la inconformidad de los asistentes.