El marrano mayor. Por desgracia la corrupción es el distintivo de los mexicanos en todos los ámbitos. El político supera cualquier albañal. Por algo Casa Aguayo antes de ser sede de los gobiernos. Fue una vecindad conocida como la «marranera». Y como consecuencia alberga al marrano mayor.
El baño de estiércol que a diario se da el gobierno actual. Servirá para conservar de por vida el fétido olor. Ningún desinfectante será suficiente para limpiar las toneladas de suciedad.
La falsa limpia de la cochiquera que pretende Gerónimo Barbosa, con la detención del marinista Valentín Meneses, es imposible. Si bien podría ser culpable de los delitos que le imputan. Es reflejo del barbosismo.
El plan con maña del cerdo mayor contempla tres puntos:
1.- El más importante: ganar a garrotazos las próximas elecciones. Prometió a sus superiores en México entregar buenas cuentas. Los momios no le favorecen. Y es de tal magnitud su temor de perder que infunde temor.
2.- Proyectar una falsa guerra anticorrupción. Copia burda. Ridícula de AMLO. Exhibe su falta de cerebro. Los chanchos no piensan. El destino inevitable es el cazo.
3.- Apoderarse -como lo ha hecho a través del traidor marinista Ricardo Velázquez de notarías- de la notaría pública de Valentín Meneses. Los cochinos obtendrán más de 10 millones de pesos de botín.
Debería empezar el aseo de la porqueriza entre los funcionarios de su gabinete. Todos en complicidad con él saquean a Puebla con ambición desmedida. La medida de castigar a quienes han delinquido es positiva, por supuesto.
Sin embargo cuando se es igual o más marrano. Se pierde credibilidad. Y eso sucedió al mayor de la piara desde el inicio de su gobierno.
A Velentín le imputan el delito de evasión de reos. Ante la posibilidad de no configurarse el delito y con un buen amparo podría librarla. Por ello tratan de inculparlo de enriquecimiento ilícito.
Gerónimo, cojea del mismo pié -único-.
Otros involucrados que en breve deberían responder de las anomalías son: el entonces director General de Ejecución de Sentencias y de Medidas, Indalecio Cuesta Torres. Así como Filiberto López Zavala, quien fungía como director Técnico de los Ceresos de Puebla y es hermano de Javier López Zavala, ex candidato a la gubernatura en 2010.
Tal vez no inculparan a Filiberto, por la amistad que el chiapaneco Javier tiene con Gerónimo. Y estar ligados a la «marranera» en la actualidad es gozar de impunidad.
Y sobre todo Joel Daniel Baltazar, quien era director de centros penitenciarios y ahora magistrado del TSJ.
Valentín podría alcanzar una pena máxima de 6 años. Pero también si es condenado por delito intencional no podrá ejercer como notario. Es lo que quieren los cerdos para quitarle la patente. Podrían llevarse una sorpresa si nombró suplente.
De acuerdo con un amigo experto en leyes. Tanto Mario Marín como Valentín con buenas defensas saldrían. No de manera inmediata pero si la libran. Aunque el primero eligió al «Loco» Téllez, conocido abogado por exprimir a sus clientes.
El caso de Meneses Rojas es menos complejo. Sin embargo como mínimo deberá pasar un año de proceso para verle el color al caldo.
¡Así o más asqueroso!
Reporte del Informante
Guerra sucia. Con los aspirantes de diversos partidos arrancaron las precampaña en Puebla. Y concluirán el 16 de febrero de acuerdo con los lineamientos del Instituto Nacional Electoral -INE-.
La atención la acaparan los inscritos a la candidatura por la presidencia municipal por Morena. De los anotados, al desistir el senador Alejandro Armenta. La disputa se centra en la actual edil Claudia Rivera Vivanco. Y Gabriel Biestro Mendinilla, obsesión de Gerónimo Barbosa.
La batalla que se avecina para ganar la designación, será en superlibre. Claudia, deberá cuidar todos los ángulos. Sabe que Gerónimo no combate de frente. Es traidor por naturaleza. Se envalentona pero es cobarde. Eso lo hace peligroso.
Si la encuesta de Morena es derecha. Habrá ganadora.
¡Cuidado el traidor anda suelto!
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