Adrián Ruíz
Cumple años felíz. El tío Tobi -así le dicen sus allegados a Eduardo Homero Tovilla Lara, el hombre poderoso de las finanzas con Rafael Moreno Valle y su esposa Martha Erika Alonso -como gobernadores-. El otrora pudiente Don dinero, fue aprehendido la semana pasada -jueves 20- fuera del país.
En la Secretaría de Finanzas, la noticia fue una alerta general. Aún sobreviven algunos tentáculos del tío Tobi. En las direcciones de recursos humanos y materiales, permanece gente de toda su confianza.
De acuerdo con información extraoficial, fue aprehendido el jueves pasado en Estados Unidos. Al tío Tobi, le permitieron festejar con gran jolgorio su cumpleaños número 56 el 14 de Junio del presente año. Poco más de un mes después el gozo se fue al pozo.
Quienes no asistieron a la fiesta. Lo felicitaron vía telefónica y con mensajes de WhatsApp. El tío Tobi se confió y empezó a visitar a familiares y amigos. El festejo de otro aniversario (56) más de vida lo vivió en libertad.
A pesar que sabía que era una de las presas más codiciadas del muerto. Tenía una orden de aprehensión liberada desde 2021. Consiguió evadir el brazo ejecutor de la ley por dos años.
Eduardo Tovilla, habría sido detenido por los delitos de ejercicio ilícito de atribuciones. Y además por la autorización de pagos indebidos o irregulares, a su paso por la Secretaría de Finanzas.
Las presuntas acusaciones, sólo fueron el pretexto para fincarle responsabilidades. El fondo del asunto es que pertenecía al privilegiado círculo de poder de Rafael Moreno Valle y Martha Erika Alonso.
Martha Érika Alonso lo designó secretario de Finanzas y Administración. Por la muerte de la primera gobernadora de Puebla, su gestión duró escasos 10 días. También fue Subsecretario de Egresos y Director de presupuesto en la Secretaría de Finanzas y Administración en la gestión de Rafael Moreno Valle.
El muerto en diciembre de 2019, se valió de la amistad del entonces titular de la Unidad de Inteligencia Financiera Federal, Santiago Nieto Castillo, para investigar el presunto enriquecimiento ilícito del tío Tobi.
Al siguiente año en julio el muerto ordenó a la Auditoría Superior del Estado de Puebla -ASE- investigarlo a fondo. El desaparecido lo ligó a la estructura de otro hombre influyente del morenovallismo, Eukid Castañón Herrera -inculpado y apresado también por quién creen: el muerto-.
Como todo acusado el tío Tobi, tiene derecho a defenderse de las acusaciones. Pero de que tuvo y ejerció el poder en Finanzas y Administración, es cierto. Y se dió el lujo de imponer personal y condiciones en otras secretarías y direcciones del gobierno.
Ni el quebranto de 600 millones -que por cierto ha quedado impune- de la exsecretaria de Finanzas, Teresa Castro Corro, fue tan satanizado como las acciones del tío Tobi.
¡Focos rojos en Finanzas!
Reporte del Informante
TSJ en quiebra. La efervescencia política en Puebla, con las visitas de los presidenciables -Adán Augusto y Claudia Sheinbaum-, acaparó la atención informativa. Opacaron lo sucedido con los empleados del Tribunal Superior de Justicia -TSJ-. se suscitó una protesta masiva de trabajadores basificados por falta de pago quincenal.
Personal del TSJ- salió de vacaciones confiados que les depositarían sus quincenas. Lo que no ocurrió. Los que salieron de Puebla, comprobaron con desagrado que los habían dejado sin el pago correspondiente.
Los que permanecen en la ciudad, acudieron al TSJ para protestar y exigir sus quincenas. Tampoco encontraron eco. Carlos Palafox, presidente de la Judicatura y Margarita Gayosso, presidenta del Tribunal, no estuvieron porque a ellos si les depositaron para vacacionar a gusto.
¿Qué está pasando en el TSJ? La situación económica es crítica. Prevalecen malos manejos y un enorme hoyo financiero, que nada importa a las autoridades. La indiferencia es porque solo ven por su futuro político y económico .
La indiferencia ha generado que el tribunal sea un nido de ratas de cuello blanco. El borrón y cuenta nueva tras la salida del mayor saqueador del TSJ en los últimos años: Héctor Sánchez Sánchez -y su equipo-.
Sólo fomenta un absoluto clima de impunidad. Sin meterse en problemas hasta el punto de sostener a un fiscal inoperante.
El Tribunal Superior de Justicia, ha sido de la administración de Mario Marin, a la fecha un centro de reacomodo laboral de servidores públicos quemados o inservibles que han llegado al Poder Judicial del Estado. Es un centro de trabajo para familiares y amigos, sin mérito alguno.
El Poder Judicial del Estado, sirve como trampolín para quienes mueven los hilos del TSJ. Ponerse a las órdenes del poder ejecutivo -venden la presumida autonomía-, les reditúa beneficios económicos y políticos.
Al mismo tiempo buscan nutridas pensiones y acumulación de riqueza comercializando la justicia. Mientras los directivos administrativos se despachan con la cuchara grande de los recursos propios del TSJ.
¡Poder de papel!
ruizdur@hotmail.com
